El Museo Horniman de Londre, comenzó el proceso de devolución de 72 obras sustraídas por las tropas británicas a Nigeria en el siglo XIX. Se trata del primer museo del Reino Unido en tomar oficialmente una acción de este tipo con los países que colonizó.
Este lunes, el director de la institución, Nick Merriman, hizo la devolución de seis piezas compuestas de bronce del antiguo reino africano de Benín que habían sido expropiadas en 1897 por los británicos.
Según apuntó, consideraba “apropiado” y “un deber moral” devolver esas obras, sobre todo después de que en enero las reclamara la Comisión Nacional de Museos y Monumentos de Nigeria (NCMM, en inglés). En ese sentido, remarcó que las dos partes llegaron a un acuerdo por el cuál el Horniman conservará momentáneamente las piezas restantes a modo de préstamo.
"Después de una detallada investigación no cabía duda que habían sido saqueados, había un argumento moral para su devolución", reflexionó Merriman. Y añadió: "Creo que ahora estamos viendo un punto de inflexión no solo en torno a la restitución y la repatriación, sino también en la actitud de los museos que reconocen su historia colonial, y eso es mejor historia".
Los llamados “bronces de Benín” son reclamados por los nigerianos argumentando que fueron quitados por la fuerza en el marco de una expedición militar británica. Benín es un país de África Occidental, de habla francesa que actualmente está integrado a Nigeria.
El jefe de la NCMM, Abba Tijani, manifestó a la cadena BBC que la acción significaba "un gran día" para la cultura e historia nigeriana, y expresó que esperaba que "otros museos se sientan alentados por este ejemplo”.
"Creo que pronto se podría llegar a un acuerdo con el Museo Británico que posee otras 900 piezas, una gran proporción de objetos de Benín", agregó, pese a que el museo nunca especificó si planea devolver obras, como sí hicieron otras instituciones del mundo.
Asimismo, el funcionario nigeriano apuntó que hay repartidos por el mundo unos 5.000 objetos artísticos producidos desde el siglo XIII por la sociedad beninesa, y que está en conversaciones con distintas instituciones para lograr su devolución.
Por último, el académico agradeció que el Museo Horniman "haya hecho lo correcto" y subrayó que ahora "el pueblo de Benín y África tienen la oportunidad de ver e interactuar con estos objetos, lo que no han podido hacer durante décadas".