Un empleado de la embajada de Ucrania en Madrid sufrió heridas leves al estallarle una carta bomba que iba destinada al embajador, lo que llevó a Kiev a ordenar el refuerzo de la seguridad en todas sus representaciones diplomáticas. La misiva llegó por correo normal a la embajada, ubicada en una zona residencial en el nordeste de la capital española, y no pasó el escáner antes de que la abriera el operario de seguridad a cargo, informó la delegada del gobierno en Madrid, Mercedes González. Aunque no hubo que lamentar heridos, la sede de una empresa armamentística en Zaragoza recibió este miércoles un sobre similar al que iba dirigido al embajador ucraniano.

Según la delegada del gobierno madrileño, Mercedes González, un trabajador resultó herido al abrir una carta en el jardín de las dependencias de la legación "dirigida al propio embajador" y traída por "el cartero que acude todos los días a la embajada". El embajador de Ucrania en España, Sergei Pohoreltsev, precisó a un medio ucraniano que se trataba de un paquete más grande, con una caja en su interior, que despertó sospechas en su secretaria después de ver que no tenía remitente, por lo que se lo llevó al jefe de seguridad.

Este empleado optó por salir con la caja al patio antes de abrirla, para evitar que "hubiera alguien cerca". Al abrirlo este trabajador escuchó un "clic", por lo que tiró inmediatamente la caja, que explotó a continuación. La deflagración del material explosivo generó pequeñas heridas en el dedo anular de la mano derecha del trabajador, que se dirigió por sus propios medios hasta el hospital Nuestra Señora de América, donde le curaron las lesiones.

Posible caso de terrorismo

La justicia española abrió diligencias para investigar un posible delito de terrorismo, indicó un vocero del alto tribunal de la Audiencia Nacional competente en la materia. El titular del Juzgado Central de Instrucción Número 4, José Luis Calama, recibió un informe preliminar elaborado por la policía en el que se incluyen detalles esenciales sobre el incidente.

En un comunicado el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, afirmó haberse contactado con su par ucraniano Dmitro Kuleba, así como con el embajador de Ucrania en España, para interesarse por el estado de salud del empleado herido y transmitirle su solidaridad luego del atentado.

Las autoridades españolas no mencionaron ninguna pista hasta el momento. Interrogado sobre los posibles instigadores del incidente, el embajador ucraniano señaló implícitamente a Rusia. "Sabemos los métodos terroristas del país agresor. Los métodos, los ataques de Rusia nos obligan a estar preparados para cualquier tipo de incidente y provocación", dijo Pohoreltsev.

"Estoy seguro de que todos mis colegas en todas las embajadas están listos y espero que no tengamos más incidentes como estos más adelante", indicó el embajador, quien de todas formas remarcó que no tiene miedo y sigue trabajando codo a codo con las autoridades españolas y con los ministerios de Exteriores, Defensa y el conjunto del gobierno, a quien agradeció la colaboración con Ucrania y el apoyo militar que se le está suministrando para hacer frente a la guerra.

Seguridad reforzada

Luego de la explosión de la carta, Ucrania llamó a reforzar la seguridad de todas sus embajadas. "El ministro Dmitro Kuleba ha ordenado reforzar la seguridad de todas las embajadas ucranianas. También ha pedido a las autoridades españolas que investiguen urgentemente este ataque", indicó en Twitter el vocero del ministerio ucraniano de Relaciones Exteriores, Oleg Nikolenko.

Nikolenko también convocó a sus pares españoles a "tomar medidas urgentes para investigar el ataque", señala el comunicado, que agrega que el autor del ataque, quien quiera que sea, "no logrará intimidar a los ucranianos diplomáticos o detener su trabajo diario para fortalecer a Ucrania y contrarrestar la agresión rusa".

Las autoridades españolas también decidieron reforzar la seguridad en la Embajada de Ucrania en Madrid luego de la deflagración de este miércoles, aunque no dieron más detalles por motivos de seguridad.

Investigan otro envío sospechoso

Este miércoles también se detectó, cerca de las 19 horas, un "envío postal sospechoso" en la sede de la empresa Instalaza en Zaragoza, por lo que las unidades policiales de desactivación de explosivos (TEDAX) "han realizado una explosión controlada del artefacto", indicó una fuente del ministerio del Interior. Instalaza es una empresa que se dedica al diseño y fabricación de material militar de infantería. 

El Periódico de Aragón advirtió que uno de los motivos que podría estar detrás de la recepción de este paquete sospechoso sería que en Instalaza se fabrican los lanzamisiles que el Ejército ucraniano emplea en la guerra contra Rusia. Al inicio del conflicto militar entre rusos y ucranianos la ministra de Defensa, Margarita Robles, había anunciado el envío de 1.370 lanzagranadas, ametralladoras ligeras y municiones a Ucrania. Con ellas se destrozó un número indeterminado de tanques rusos, sobre todo en la primera fase del ataque ruso. 

Desde el inicio del conflicto entre rusos y ucranianos el 24 de febrero, el gobierno español del socialista Pedro Sánchez envía ayuda a Kiev, especialmente militar. Recientemente hizo llegar también generadores de electricidad, para hacer frente a los ataques rusos contra las infraestructuras energéticas ucranianas. Sánchez viajó en abril a Kiev para expresarle su solidaridad al gobierno del presidente Volodimir Zelenski.