Desde Doha

La capital de Qatar cuenta con varias atracciones, además de la ampulosidad que la envuelve en toda su dimensión. Una de ellas es el Museo Olímpico y del Deporte, que se ubica al lado del Estadio Internacional Khalifa, donde se jugará el duelo por el tercer puesto del sábado próximo.

El lugar está dentro de un edificio circular, de ocho pisos, y que también cuenta con un restaurante y una cafetería. Las luces de colores rojo, azul y amarillo se puede observar desde la calle, siguiendo la misma línea que la estructura.

El ala olímpica del museo se encuentra en el séptimo, y en el medio de antorchas, espadas, sables y plaquetas se puede presenciar una pequeña película con la historia de los Juegos. Nombres como Carl Lewis, Mark Spitz, Matt Biondi, Nadia Comaneci, Michael Phelps, Usain Bolt y Ian Thorpe se reparten en el cortometraje ofreciendo sus hazañas.

La reseña del deporte para los qataríes incluye el nacimiento del Movimiento Olímpico, el cual fue creado por Pierre de Coubertin en 1894, y se pueden apreciar diferentes figuras de esa época.

El fútbol exhibe las camisetas que utilizaron estrellas como Pelé, Maradona, Platini, el brasileño Ronaldo, Zidane, y también la que usó Messi en su debut mundialista, en Alemania 2006. En el caso de Pelé, se encuentra enmarcada una foto cuando se desempeñaba en el Santos, que precisamente se presentó a jugar un amistoso en el Doha Stadium.

El escenario fue renombrado como Khalifa en 1976, y en la última época le hicieron remodelaciones para este Mundial. Las maquetas de las ocho canchas que se utilizaron en Qatar también están a la vista, con los proyectos de cada uno de hace diez años atrás.

Los juegos interactivos son otro entretenimiento en esa zona. Se puede saltar, remar, hacer surf, andar en bicicleta, y hasta patearle penales a un arquero de madera. La persona que desea recibir su análisis particular puede usar una pulsera que mide el rendimiento en cada disciplina.

El automovilismo es otro de los puntos salientes. La Ferrari con la que el alemán Michael Schumacher logró el título de Fórmula 1 en 2000, cortando una sequía de 21 años de la escudería sin poder llegar a la cima en la máxima categoría, brilla rodeada por un acrílico.

La gente de aquí levanta la cabeza cuando tiene que hablar de Nasser Saleh Al Attiyah, el piloto de rally y jeque local, quien tiene un espacio especial dentro del Museo. Al Attiyah logró la medalla de bronce en los Juegos de Londres 2012 en skeet, modalidad que consiste en tiro al plato.

Al Attiyah es primo hermano del actual Emir de Qatar, y esa relación le vale el tratamiento de jeque. El paso al automovilismo lo terminó de consagrar: ganó el Campeonato Mundial de Producción en 2006, y el Campeonato Mundial de Rally-2 de 2014 y 2015. Entre otros títulos, ganó el Dakar en 2011, 2015, 2019 y 2022.

El lugar derrama nostalgia por la historia deportiva que encierra. Con personajes que lo realzan a medida que siguen pasando los años.