Argentina calienta la previa en las últimas horas antes de la final del Mundial Qatar 2022. La expectativa fue creciendo con el transcurso de los días. Desde un arranque complicado contra Arabia Saudita, hasta un cómodo triunfo contra el vigente subcampeón por 3 a 0.

Sin duda, si se quiere repasar las mejores jugadas de Argentina hay que arrancar con el tercer gol de la Selección al equipo de Luka Modrić. Allí, de un lateral de casi mitad de la cancha, Messi arrancó, amagó en tres ocasiones a Gvardiol, uno de los defensores favoritos del Mundial, y le dejó, tras escapar por la línea de cal, el gol en los pies a Julián Álvarez.

La paciencia para encontrar el hueco fue central para el juego de Argentina, que se tuvo que enfrentar con países defensivos por demás. Así, a puro toque, el nuevo y joven mediocampo argentino encontró el espacio. Esta vez el que encontró el pase preciso fue Enzo Fernández, y permitió el 2 a 0 contra Polonia.

Cuando el partido está cerrado, el gol puede llegar, sencillamente, de una genialidad. Y “Fideo” Di María no se iba a ir al entretiempo sin probar una de sus locuras. Fue ante Polonia, cuando pasados 30 minutos el marcador seguía 0 a 0. El jugador de Juventus probó desde el córner y Szczesny sacó un pelotón que se le convertía en gol olímpico. No fue la última vez, con Países Bajos, en los pocos minutos que jugó, intentó lo mismo.

Si de encontrar el espacio se trata, se tiene que mirar 100 veces el primer gol de Argentina contra Países Bajos. Como tiene acostumbrado al público, Messi vio un hueco que nadie más vio, y Molina, en una corrida ejemplar y un nivel altísimo, se filtró entre los defensores naranjas y definió con seguridad el 1 a 0.

Faltaban cuatro minutos para que se cumplan los 90 reglamentarios de un partido chivo, difícil y que podía marcar el regreso a Argentina de la Selección. La pelota pesaba para muchos, pero no para Enzo Fernández, que desde un pase en el córner sacó un zapatazo al ángulo que le dio el respiro al equipo y el 2 a 0 a La Scaloneta.

Lautaro “El Toro” Martínez no tuvo muchas durante el Mundial. El goleador de la era Scaloni llegó con un golpe al Mundial y después del primer partido fue reemplazado por Julián Álvarez. 

Sin embargo, cuando entró, fue clave. Tuvo en sus pies la fría definición por penales contra Países Bajos y un golazo en el primer partido que fue anulado por el VAR por encontrar que estaba adelantado por unos centímetros del hombro.

Argentina ganaba 2 a 0 contra Australia por los octavos de final cuando Messi paralizó el corazón de todos los hinchas del mundo. Y no por un gol del contrincante, sino por la jugada que empezó a gestar desde la mitad de la cancha, amagando a uno tras otro de los defensores australianos, que se desplomaban como conos amarillos. 

La jugada no terminó en gol, pero mostró que la magia del 10 sigue intacta.