Argentina ganó la final del Mundial Qatar 2022 y Lionel Messi alzó la tan anhelada Copa del Mundo. Al consagrarse campeones, todos los países conservaron una réplica durante sus cuatro años de reinado. El reglamento de la FIFA establecía que, al ganarla tres veces, la nación tricampeona se la llevaría a casa y el trofeo sería reemplazado por uno nuevo. Eso pasó en 1970, con Brasil. Pero a partir de entonces, esa tradición fue eliminada del reglamento.
Hasta 1970, la Copa no era la reconocida e histórica dorada de punta redondeada. La denominada “Jules Rimet” tenía otro diseño: era más delgada y aplanada y representaba a Niké, la diosa griega de la victoria, con sus alas estilizadas. Medía unos 30 centímetros de altura y pesaba 4 kg, de plata esterlina enchapada en oro.
Ese trofeo se entregó desde el primer Mundial de 1930 –en Uruguay– a cada campeón. Pero en 1970, Brasil lo ganó por tercera vez en su historia y, de acuerdo al reglamento vigente, se la quedó de forma definitiva.
En tanto, en 1974 –cuando el certamen se realizó en Alemania–, la FIFA entregó por primera vez la nueva edición de la Copa, que es la misma que se entregó este domingo en Qatar.
¿Por qué Argentina no se la lleva de forma definitiva?
Desde que existe el actual premio, Argentina había podido levantarlo en dos ocasiones –1978 y 1986–. En ese lapso, Alemania la alzó tres veces –primer país en hacerlo con esta edición–; Italia, Brasil y Francia dos cada una; y España una. En tanto, Argentina se convirtió ahora en el segundo país en ganar tres veces este trofeo.
Sin embargo, tal como ocurrió con Alemania en 2014, donde los germanos la levantaron por tercera ocasión, los tricampeones no se quedarán con la Copa. Al cambiarla en 1974, la FIFA le puso fin a esa tradición e incorporó en el reglamento: “Ningún país podrá conservar definitivamente el trofeo actual de la Copa Mundial de la FIFA, ya que las normas establecen que permanecerá en posesión de la FIFA”.
De todas formas, los jugadores podrán disfrutar de la original durante algunos pocos días y, después, la máxima entidad del fútbol entregará una réplica que la AFA podrá conservar hasta que se realice el sorteo del próximo Mundial.
Así, Argentina tendrá la copia durante cuatro años y se la entregará a Canadá, Estados Unidos y México –sedes en 2026– cuando se realice dicho evento. Al igual que este domingo, el futuro campeón levantará la original tras la final.