Pasadas las 2 am de este martes, aterrizó la selección argentina en el aeropuerto de Ezeiza y miles de fanáticos los esperaban para celebrar la llegada de los campeones del mundo.
La obtención del Mundial de Qatar, con Lionel Messi como capitán, provocó que una marea de hinchas rodeara al micro durante los seis kilómetros que separan al Aeropuerto de Ezeiza del predio de la AFA.
Los jugadores fueron recibidos con alfombra roja y un recital de La Mosca, al ritmo de “Muchachos”, el tema que se convirtió en el himno de la Albiceleste en este Mundial.
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Pero también se vivió un momento de tensión por una imprudencia. Lionel Messi, Ángel Di María, Rodrigo De Paul, Leandro Paredes y Nicolás Otamendi viajaban sentados en la parte trasera del segundo piso del micro y rozaron sus cabezas con un tendido de cables que estaba a muy baja altura.
Afortunadamente, los futbolistas percibieron el peligro y pudieron reaccionar con rapidez. Fue así que todos lograron agacharse para esquivar el cable.
Aun así el susto fue muy grande e incluso Paredes perdió la gorra que llevaba puesta.