La mujer del suboficial Pablo Cejas, acribillado a balazos la noche del lunes en Santa Fe, clamó ayer por Justicia y no descartó que el crimen haya sucedido "por algo que denunció". Nancy Scarfone era la pareja de Cejas y durante la inhumación de los restos, realizada en el Cementerio Municipal ante centenares de compañeros de la fuerza, afirmó que desea ser escuchada por el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro. "Necesito que el ministro de Seguridad, que nunca lo escuchó a Pablo, me escuche a mí. Necesito que me ayuden, quiero Justicia", señaló la viuda. La mujer dijo que en los últimos tiempos Cejas no le habló de nuevas amenazas, pero no descartó que "esto le haya pasado por algo que denunció, algo estaba por pasar con la causa por las denuncias que él hizo".

Por su parte, el criminólogo Enrique Font, también se sumó al pedido de justicia y de esclarecimiento del crimen. "Cejas era un policía ejemplar porque tuvo la valentía de denunciar lo que otros callaron. Ven que sus jefes se enriquecen, ven violencia y son muy pocos los que se animan a alzar la voz. Cejas lo hizo de manera recurrente", expresó. En cuanto a las denuncias efectuadas en reiteradas oportunidades por el oficial asesinado, Font expresó que "no denunció tramas complejas, sino lo que cualquier persona que camina la ciudades de Santa Fe conoce. Son tramas visibles de delitos, comercialización de drogas, prostitución, entre otras".

Sobre la connivencia policial con el delito, el criminólogo remarcó que "algunos casos tienen involucramiento policial directo. No serían posibles sin participación de funcionarios políticos y judiciales. Si algún policía pone la lupa, empiezan a pasar estas cosas".

El especialista consideró que "habría que averiguar si esta muerte está involucrada a las denuncias o no. Cuando la corporación política sale a decir que no está vinculada a sus denuncias, es porque pasa lo contrario", manifestó a la vez que subrayó que "hay que ser muy ciego para no ver lo que denunciaba Cejas. Los que tienen que verlo y no lo ven es porque se llevan plata al bolsillo".

"Lo desgraciado es que hay pocos Pablo Cejas. El silencio hace que los corruptos sigan haciendo lo que hacen porque nadie quiere hablar, porque hablar, en la provincia de Santa Fe, tiene un costo", concluyó el ex funcionario del área de Seguridad.

En tanto Jorge Nessier, el fiscal de Homicidios que investiga el asesinato, destacó que la muerte del efectivo "no estaría relacionado con sus denuncias". El fiscal indicó: "Tenemos abierto en abanico de hipótesis teniendo en cuenta la historia de Pablo Cejas y sus denuncias". Aunque Nessier tiene antecedentes vidriosos: en 2015 la fiscalía que dirige fue la encargada de investigar el intento de asesinato a Cejas, delito que quedo impune. "Desde nuestra fiscalía ya habíamos intervenido en el 2015 por la tentativa de homicidio de la que fue víctima Cejas en la zona de Recreo pero lamentablemente, en aquel ataque no hubo testigos y no pudimos establecer quién o quiénes fueron los agresores", reconoció Nessier.

Y a renglón seguido preparó el terreno para la causa actual: "Nos estamos encontrando, como es lógico, con una gran renuencia de los vecinos al lugar de los hechos a prestar testimonio. Esto es lógico porque la gente tiene que seguir viviendo en ese lugar y teme por su vida", confesó el fiscal.

En tanto, para el ex Defensor General Gabriel Ganón, el crimen es "un hecho gravísimo, y lo que es más grave todavía es que a segundos de haber ocurrido, las autoridades políticas y del Ministerio Público de la Acusación se apresuraron a decir que el crimen no tenía nada que ver con las denuncias que Pablo Cejas había hecho, siendo que Cejas hace un tiempo había empezado a entrevistarse con el diputado Carlos del Frade, poniéndolo al tanto de cuáles eran los nichos de corrupción que denunciaba, vinculados a los jefes de la Policía. Por lo menos deberían haber tenido un poco de prudencia. No a cualquiera le meten cuatro tiros en el corazón", agregó.

Para Ganón, "que el ministro de Seguridad, el subsecretario de Investigación Criminal y el fiscal digan exactamente lo mismo, antes de que se desarrolle la investigación, da la sensación de que se pusieron de acuerdo para correr el foco del lugar al que todos debemos prestar atención".

Ayer también hizo escuchar su voz el titular de la Unidad de Protecciones de Testigos, Adrián Forni, quien salió a explicar

que Cejas había ingresado al programa de custodia en 2016 "con una custodia pasiva", luego de realizar una denuncia ante la Dirección de Asuntos Internos de la Policía de la provincia. "Fue la fiscalía la que estableció como protocolo de seguridad la intervención de unidades de custodia que no fueran policías convencionales". "Cuando se decidió qué unidad intervendría, se decidió que interviniera la Unidad Especial de Testigos Querellantes, que es una unidad muy específica, que acompaña con asesorías o entrevistas personales a personas amenazadas no sólo física sino psicológicamente. Es decir un acompañamiento pasivo con

llamados telefónicos para ver cómo está esa persona. Y ante una situación de amenaza automáticamente se pone en funcionamiento otro protocolo".

Finalmente, Forni advirtió: "Les aseguro que vamos a descubrir quiénes fueron los autores materiales y cuál fue el motivo" porque "la policía perdió a un hombre y todos sentimos un dolor enorme".

 

Programa demorado

Sin embargo, ayer también se conoció que hace casi dos años la Legislatura de Santa Fe ordenó crear un programa provincial de protección de víctimas y testigos que no dependiera exclusivamente del Ministerio de Seguridad. Los casos no debían ser evaluados por la Policía, sino también por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. La norma no se implementó y el cuidado de los testigos sigue dependiendo, en última instancia, del jefe de Policía de Santa Fe.  Según el Boletín Oficial de Santa Fe, el programa recién cuenta con un director desde hace menos de un mes. El lanzamiento será recién la semana que viene.

El 22 de octubre de 2015, la Legislatura aprobó la creación del Programa provincial de acompañamiento y protección de víctimas y testigos. Según el diputado del Frente para la Victoria, Leandro Busatto, fue pensado dentro de la órbita del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos para que la evaluación y las medidas de protección fueran dispuestas por un director civil. "La Policía aparece sospechada en muchas causas tanto de la Justicia provincial como federal. Por eso es importante que sea el Ministerio de Justicia el que garantice la protección de los testigos", dijo Busatto, autor del proyecto.

La norma preveía otros dos cargos de subdirectores y la creación del fondo provincial de recompensas que tomaría el 0,45 por ciento del presupuesto del ministerio. También disponía la creación de la Unidad Especial de Acompañamiento y Protección, dentro del Ministerio de Seguridad. Según el Boletín Oficial del gobierno santafesino, la ley del programa se reglamentó el pasado 28 de junio. Claudio Stocco fue designado como director.