La Asamblea Ciudadana de Casilda realizó ayer una nueva movilización para evitar que se construya el edificio de Tribunales en el predio del Parque Municipal Sarmiento, el mayor pulmón verde de la ciudad y espacio de infancias. El pedido para la reubicación de la obra sufrió esta semana un duro revés tras el fallo de la jueza de 1ª Instancia de Circuito Distrito Judicial Nº 7, Laura Babaya, que rechazó los amparos presentados por la concejala Manuela Bonis y la representante de la Asociación Protectora de Animales, Lucrecia Martini. En paralelo, la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe denegó el pedido de traslado de la obra, instando al municipio a que levante la clausura dispuesta semanas atrás y que restablezca el permiso de edificación. En ese marco, la Asamblea debatía si se optaba por apelar el fallo de primera instancia o avanzar en un amparo colectivo, aunque se daba por descontado que continuarán con el acampe pacífico en el lugar del que ayer se cumplía un mes.  

La jueza Babaya había convocado el lunes a una audiencia entre las partes, a partir de unificar los amparos que habían presentado Bonis y Martini, en el marco de la Ley 10.000, para que el edificio se construya en otro lugar. Luego de más de cuatro horas de reunión no se arribó a ningún acuerdo, y entre las demandantes quedó la sensación que el reclamo no iba a prosperar. 

En efecto, el pasado miércoles la magistrada decidió no hacer lugar a la medida cautelar. "El acto impugnado por las señoras Bonis y Martini no reviste visos de ausencia de legitimidad, no fue tomado en inobservancia al orden institucional y el sistema democrático, no presenta arbitrariedad ni ilegalidad alguna y ha sido dictado con apego a la ley, corresponde negar la cautelar exigida por la parte actora", definió la jueza.

"El recurso de amparo fue para pedir la participación ciudadana y el estudio de impacto ambiental. Lo que presentaron fue un plan de gestión ambiental, pero en la carátula la fecha es de agosto 2022, y en una de las hojas dice 15 de diciembre de 2022, algo que nos llamó la atención porque habían empezado a cercar el perímetro y con la tala de árboles el 7 de diciembre", dijo Martini a este diario antes de conocerse el fallo.

En la previa de la movilización que partía ayer desde la Plaza de la Memoria hacia el Parque Sarmiento, a la que se sumaban organizaciones ambientalistas rosarinas, la Asamblea evaluaba el camino legal a seguir, porque los tiempos judiciales eran muy cortos por la cercanía de la feria. "Vamos a realizar una nueva consulta y de acuerdo a lo que nos digan se resolverá en asamblea. El acampe va a continuar, sigue firme, y mañana (por hoy) haremos un segundo encuentro de arte en el parque", señaló Martini.

La construcción del edificio que será sede de los Tribunales en Casilda -un proyecto esperado por más de 15 años- en el medio del Parque Sarmiento fue rechazado por los vecinos, ya que es el mayor pulmón verde local, atravesado por el arroyo Candelaria. Además es una zona de riesgo hídrico según un estudio de la Universidad Nacional de Rosario y está definido como ecosistema de humedales por la ley provincial de áreas naturales protegidas (ver opinión).

Uno de los reclamos de la Asamblea Ciudadana fue que no se había presentado el estudio de impacto ambiental. "Hasta donde sabemos no hay ninguna autorización del Mjnisterio de Medio Ambiente provincial ni de nadie que autorice sacar esos árboles e intervenir el parque", señalaba el doctor en Agroecología, Eduardo Spiaggi. Por otra parte, la Municipalidad decidía poner una faja de clausura en el ingreso al obrador porque la empresa no había presentado toda la documentación. 

La presencia de máquinas en el lugar y la tala de varios árboles centenarios derivó en un acampe pacífico de vecinos. El pasado 9 de diciembre, la policía se llevó detenidas a siete personas, entre ellas tres estudiantes de la Facultad de Veterinarias, que intentaban impedir el ingreso de las máquinas en el lugar. Horas más tarde fueron liberados pero la protesta no se detuvo.

Por otra parte, unas nueve mil personas firmaron hasta el momento un pedido para que no toquen el parque. "Construir un edificio en el Parque Sarmiento, implica destruir uno de los espacios verdes recreativos más importantes de la ciudad. Decimos NO. Esos espacios son nuestros y de las generaciones que vienen. Sentido común y conciencia ambiental para garantizar un futuro saludable", plantearon en la petición.