El Gobierno definió metas precisas para descarbonizar el sector de transporte hasta 2030, que explica el 13 por ciento de las emisiones totales de gases efecto invernadero (GEI) del país. Estos objetivos apuntan a la renovación de la flota de vehículos livianos particulares, utilitarios y pesados, de buses urbanos e interurbanos y de última milla en favor de las unidades eléctricas, híbridas y a GNC. También proyecta la jerarquización del transporte ferroviario de pasajeros y de carga y el fluvio-marítimo para el transporte de cargas de cabotaje y una mejora general de la eficiencia sectorial.
Todas las medidas involucradas suponen un presupuesto superior a los 45 mil millones de dólares, teniendo en cuenta solamente la inversión que debería hacer el Estado nacional. Si se cumplieran esas inversiones, el sector de transporte reduciría sus emisiones en 11,7 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente (MtCO2e, que se usa para medir la emisión de gases de efecto invernadero) respecto de la situación actual.
Esa baja de las emisiones contribuiría para que el país alcance el compromiso asumido a 2030 de no superar la emisión anual de 349 MtCO2e, que implica una merma del 4,6 por ciento respecto de las 366 MtCO2e de 2018, último dato disponible.
Los datos figuran en el recientemente publicado Plan de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático, que consiste en un documento de 250 medidas de política pública definidas por parte de una gran cantidad de oficinas de distintos ministerios nacionales y compiladas por la Secretaría de Cambio Climático a cargo de Cecilia Nicolini.
Parque automotor
En el segmento de los vehículos particulares, el Plan hace foco en la renovación de las motocicletas de mensajería, los utilitarios livianos y pesados y los vehículos de carga livianos por tecnología GNC, eléctrica e híbrida. En cambio, no profundiza sobre los particulares livianos, en donde las terminales automotrices esperan primero tener una etapa de modelos híbridos para recién después dar pasos hacia los eléctricos.
*Motos: El Plan apunta a renovar 61.590 motocicletas de mensajería (el 1,18 por ciento del total) particulares nafteras a unidades eléctricas BEV.
*Última milla (utilitarios): Se renueva el 9,5 por ciento de los vehículos utilitarios livianos a diesel y nafta (99.587 unidades) por eléctricos enchufables. Se convierten 131.301 utilitarios livianos al GNC, para que el parque en esa tecnología pase del 8,93 al 15,45 por ciento del total.
*Última milla (de carga livianos y pesados): Se renueva el 1 por ciento de los vehículos de carga livianos a diesel y nafta por vehículos eléctricos (1.614 unidades), al tiempo que se incorporan vehículos de carga livianos a GNC al parque total, aumentando la participación de este combustible de un 0 por ciento en la actualidad a 1,22 por ciento (1.545 vehículos). Además, se renueva el 6,81 por ciento de los vehículos utilitarios pesados a diesel y nafta por vehículos eléctricos (153.173 unidades) y también a aumenta de GNC respecto al parque total, de un 3,45 por ciento en 2020 al 10,66 por ciento (192.441 unidades).
*Pesados larga distancia: Se renuevan 1021 vechículos diesel pesados de carga para transporte interurbano por unidades eléctricas, 15.359 unidades por GNL y 496 unidades por GNC. Para la provisión de energía de los camiones eléctricos, se instalan 459 cargadores ultrarrápidos y 5 hidrogeneras.
*Movilidad eléctrica: Se instalan 61.590 cargadores lentos para motovehículos BEV, 86.261 cargadores lentos, 2.500 cargadores rápidos y 1.500 estaciones o patios de cargas para la recarga de autos y 18 mil cargadores lentos para vehículos de pasajeros cautivos- taxis/remises BEV.
*Flota vehicular pública: se prevé el recambio de las 13 mil unidades de la administración pública nacional por tecnologías eléctricas y hasta 146 mil unidades a través de compras conjuntas con otras jurisdicciones. El presupuesto asignado es de 3 mil millones de dólares.
En total, las medidas para la renovación del parque automotor exigirían inversiones del Estado por 23.200 millones de dólares y permitirían una reducción de las emisiones de GEI del orden de las 4,27 MtCO2e.
Transporte público
*Buses urbanos: El Plan apunta para 2030 la renovación del 21,81 por ciento de los buses urbanos por buses eléctricos (8.847 unidades) y la incorporación de 7538 buses a GNC a la flota urbana regular. También se incrementa en 5378 unidades los buses a biodiesel B100 en la flota urbana regular. Se instalan 3.981 cargadores ultra rápidos, 20 hidrogeneras y 66 Estaciones o Patios de Carga para el universo de 8.847 de buses urbanos tanto BEV s y FCEVs. Este sector demanda inversiones por 8500 millones de dólares, que permitirían reducir emisiones por 0,49 MtCO2e.
*Larga distancia: Se incorporan 3950 buses a GNC a la flota interurbana regular y 2722 buses a GNL. Esto requeriría inversiones por 4 mil millones de dólares, con una mitigación de 0,13 MtCO2e.
Trenes
El Plan propone la jerarquización del transporte ferroviario, debido a que es mucho más eficiente que el automotor en relación a las emisiones per cápita o por tonelada de carga transportada.
Entre las acciones a llevar adelante en los trenes de pasajeros, menciona la "renovación y puesta en valor de estaciones para la promoción de la intermodalidad, creación de viaductos ferroviarios, electrificación de tramos de vías ferroviarias y sistemas de frenado automático (ATS) y barreras automáticas, ampliación y modernización de la red, renovación y expansión del material rodante, obras de aumento de potencia de la red eléctrica de alimentación y la ejecución de pasos a desnivel".
El objetivo es que en 2026 aumente la demanda ferroviaria por parte de pasajeros, los viaductos construidos pasen de 8,9 a 13 km, abran 17 nuevas estaciones elevadas asociadas a dichos viaductos y haya un incremento de la potencia en las líneas metropolitanas Mitre, Roca y Urquiza.
En cuanto al transporte ferroviario de carga, el Plan apunta para 2030 a que haya un aumento en la participación del ferrocarril en la matriz modal hasta el 10,9 por ciento de las toneladas-kilómetro totales. Se incorporarían 107 locomotoras de 3000 hp para Trenes Argentinos Cargas, 4.500 vagones para las trochas, ancha, métrica y estándar y 300 contenedores, junto a 24 nuevas estaciones de servicio construidas y/o ampliadas y 9 talleres ferroviarios remodelados y/o ampliados. El presupuesto total del capítulo ferroviario es de 2800 millones de dólares y la reducción estimada de emisiones sería de 2,4 MtCO2.
Barcos y aviones
El Plan espera que aumente el uso de servicios fluvio-marítimos de cabotaje en el transporte de cargas para largas distancias y que se desarrollen los puertos provinciales. "Al 2030, el 18 por ciento de las toneladas-kilómetro totales de cabotaje corresponden a modos fluviales y marítimos", indica.
Para ello, prevé la construcción de "nuevas terminales portuarias y muelles, la modernización y ampliación portuaria, dragado y balizamiento, la mejora de la gestión de la vía navegable troncal y la ampliación y profundización del Canal Magdalena en el Río de la Plata". Con una inversión de 1200 millones de dólares, se apunta a mitigar 0,829 MtCO2e a partir del mayor uso del transporte fluvial de cabotaje.
La aviación ya tiene su propio plan de descarbonización, el Plan de Acción para la Reducción de Emisiones de la Aviación Argentina, en donde uno de los principales puntos radica en el "ahorro de combustible de las aeronaves tanto por eficiencia en las rutas, como por mejoras tecnológicas". El objetivo de mitigación es de 0,332 MtCO2e y el presupuesto total, de 1500 millones de dólares.