Jonathan Morel, líder del violento grupo Revolución Federal, se presentó este lunes ante la justicia federal porteña para denunciar que se siente con miedo, luego de informar que en el ingreso a la ciudad bonaerense de Chivilcoy, destino donde se encuentra trabajando, habrían sido colocados carteles que repudian su presencia allí. Morel, quien recibió una cifra millonaria de la compañía familiar de los Caputo para trabajos de carpintería que aprendió vía Youtube, se encuentra procesado por amenazas de muerte contra Cristina Kirchner y Alberto Fernández.
De acuerdo con la denuncia presentada en Comodoro Py, Morel -cabeza del grupo violento de ultraderecha- se encuentra "trabajando" en Chivilcoy y fue en esa misma localidad en la cual aparecieron mensajes de repudio a su presencia. "Como los nazis les va a pasar, a donde vayan (Revolución Federal) los iremos a buscar", decían -con el mismo cántico utilizado en las marchas de Verdad, Memoria y Justicia- los carteles que hasta incluían firma: Peronismo militante Chivilcoy.
Morel hizo la presentación ante el juzgado federal número 8 donde tramita el expediente en el que se encuentra procesado bajo la acusación de haber llevado adelante un plan criminal que tuvo por objeto imponer sus ideas y combatir las ajenas por la fuerza o el temor en aquellos a los que considera enemigos. Es que el líder de Revolución Federal está acusado de promover acciones violentas contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, su hijo el diputado Máximo Kirchner y el presidente Alberto Fernández, entre otros.
Cuando lo procesó junto a otros miembros de Revolución Federal, el juez Marcelo Martínez de Giorgi refirió que "pudo comprobarse que, con tal accionar, atentaron contra el orden público y ocasionaron un claro perjuicio a los bienes jurídicos de la paz social y la tranquilidad pública necesarios para el funcionamiento de un Estado de Derecho".
El juez sostuvo entonces que "tanto por redes sociales como en las calles, realizaron actos y emitieron expresiones tendientes a alentar o incitar a la persecución, a la violencia colectiva y a la propagación del odio, constituyéndose así en uno de los actores que agitaron en la sociedad un clima de violencia social, cuyo acto de mayor gravedad institucional resultó ser el intento de magnicidio" contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El juez destacó en aquel fallo "la distribución de folletería y la utilización de determinadas insignias o lemas tales como ´van a correr´ o ´Todos presos, muertos o exiliados´ -entre otros-, replicados en forma masiva en distintos medios y redes sociales, que utilizaron como herramienta de difusión, y donde sus mensajes, como se dijo, alcanzaban a un sinnúmero de personas".
Ahora, sin embargo, Morel dice sentirse amenazado. Y su presentación judicial será remitida a la justicia provincial para que determine si corresponde iniciar una investigación o desestimarla.
El repudio del PJ de Chivilcoy
Días atrás el PJ de Chivilcoy emitió un comunicado con el que repudió la presencia del referente de Revolución Federal en esa ciudad bonaerense y advirtió que "ahora tenemos a un neonazi en nuestras calles" por lo que apuntó contra la "maquinaria de impunidad de (los tribunales de) Comodoro Py".
Además, se manifestaron en contra del "accionar de una ´Justicia´ que condena a los chivilcoyanos a tener que convivir con este monstruo que ha sido promotor de violencia política de manera pública" y denunciaron la "maquinaria de impunidad de Comodoro Py".