El próximo 1º de febrero el exCEO de Syngenta, Antonio Aracre, asumirá formalmente su nuevo cargo de jefe de asesores del Gabinete de Alberto Fernández.
En este marco, Aracre sostuvo este martes que pensaba tomarse "unos meses sabáticos" luego de su cese en la actividad privada, pero que al recibir la propuesta del presidente vio una "oportunidad de devolverle algo a la sociedad luego de lo que me brindó el país en 40 años de trabajo".
En diálogo con AM750, el flamante jefe de asesores explicó los dos aspectos en los que estará enfocada su gestión: "El primero, tratar de acercar y abrir al gobierno al sector privado, al mundo de las inversiones y del capital, que vamos a necesitar en los próximos 3 a 5 años para poder apalancar todas las oportunidades que tiene la Argentina en materia de gas, hidrocarburos, litio, minería y, por supuesto, agricultura y ganadería".
"Y seducir a la inversión también va a ser la única forma en la que la gente pueda sentir concretamente que las posibilidades le llegan y que pueden vivir mejor si logramos transformar esas oportunidades en trabajo y en mejores condiciones laborales", agregó al respecto.
Por otro lado, se refirió a uno de los trabajos que vislumbra como más difíciles: el de generar consensos.
"Hay un trabajo importante en materia de generar consensos básicos con los sindicatos, con la oposición y, por supuesto, con el gobierno, de manera tal de lograr tres o cuatro puntos que, cualquiera sea el que gobierne la Argentina en los próximos diez años, podamos respetar y en los que podamos contribuir todos, acordar eso juntos", señaló.
Según el exCEO de Syngenta, uno de los puntos tiene que ver con dilucidar "qué Estado queremos". "Dónde queremos un Estado más moderno, más eficiente, dónde uno menos burocrático y cómo lo vamos a afinar, y cuáles son los impuestos que son malos y no queremos y cuáles los impuestos que son buenos y por los cuales deberíamos recaudar más y mejor", detalló.
Por último, aseguró que una "reforma del Estado" y una "reforma tributaria" son "elementos básicos y críticos" en donde se puede realizar una diferencia "relativamente rápida e importante a la vez".
