En la previa al Día de Reyes, la Aduana secuestró 7.155 juguetes por un monto de 30 millones de pesos que habían ingresado al país en forma irregular o no tenían las certificaciones de seguridad. Los operativos realizados por el organismo que conduce Guillermo Michel tuvieron lugar en cuatro ciudades en simultáneo: CABA, Córdoba, Mendoza y Rosario. “La extraordinaria cantidad de mercadería incautada se debió tanto al fraude marcario como a la falta de certificaciones de seguridad y de documentación respaldatoria”, informó Aduana. El fraude marcario se detectó en villanos, por ejemplo, de Batman con un sello de Marvel o pokemones (Nintendo) con la máscara del Hombre Araña (Marvel); en auriculares, pelotas de futbol y muñecas Barbie encontraron fallas similares. A eso se suman “productos apócrifos que no han atravesado los debidos procesos de certificación, para cuidar la salud de los niños”, según señaló Julián Benítez, de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete.