El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, viajó este domingo a la frontera sur limítrofe con México en su primera visita desde que asumió el cargo en enero de 2021, para inspeccionar un punto de entrada de El Paso, Texas, en medio de debates sobre la inmigración ilegal y el contrabando.
Biden se reunió con personal uniformado del Servicio de Aduanas e Inmigración en el puesto de control del Puente de las Américas, un complejo de edificios de inspección y vallas que separan a los dos países.
Los agentes y oficiales, incluidos especialistas en perros rastreadores, le dieron a Biden una demostración de técnicas para registrar vehículos que traspasan la frontera.
El mandatario estaba viendo "de primera mano... el increíble trabajo de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos", declaró a periodistas presentes en el lugar el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas.
Biden también tenía previsto visitar un centro de servicios de apoyo a inmigrantes, donde se reuniría con grupos religiosos y humanitarios que ayudan a "migrantes que huyen de la opresión y el colapso económico" en sus respectivos países, acotó el funcionario.
El presidente estadounidense debía volar tras esta visita hacia Ciudad de México para una cumbre regional con los líderes de México y Canadá, Andrés Manuel López Obrador y Justin Trudeau, respectivamente.