Un avión con 72 personas –entre ellos, uno de nacionalidad argentina– se estrelló este domingo en Nepal y dejó un saldo de al menos 68 víctimas fatales, según informó la policía local, y buscan a los desaparecidos. La aeronave había partido del Aeropuerto de Katmandú-Tribhuvan y cayó antes de llegar a Pokhara, en el centro del país, donde debía aterrizar. Pero la tragedia no es un hecho aislado en el historial del país asiático.
Nepal está entre los 10 países del mundo con mayor cantidad de accidentes aéreos y entre los cinco con más cantidad de fallecidos por esa causa, según la Red de Seguridad en la Aviación (ASN, por sus siglas en inglés).
El país asiático cuenta con algunas de las rutas aéreas más remotas y complicadas del mundo, con una geografía compleja y picos nevados que presentan un enorme desafío incluso para los pilotos más experimentados. A esto se le suma un crecimiento notorio en la cantidad de nepaleses que viajan en avión en los últimos años.
Por la falta de formación del personal y mantenimiento de las aeronaves, los problemas de seguridad se repiten. La última vez fue en mayo del año pasado, donde 22 personas de la aerolínea Tara Air fallecieron en un accidente de este tipo. Antes, en 2018, se produjeron otras 51 víctimas fatales al estrellarse una aeronave de US-Bangla Airlines, cerca de Katmandú. Dos meses antes, un avión de Thai Airways se accidentó cerca del mismo aeropuerto, dejando 113 muertos.
Tanto estas firmas de aerocomerciales como el resto de las radicadas en esa nación advierten que Nepal no cuenta con la infraestructura necesaria para definir previsiones meteorológicas precisas, especialmente en las zonas donde se registraron los siniestros aéreos en los últimos años.
Por estos motivos, hace 10 años la Unión Europea prohibió a estas compañías nepalesas transitar el espacio aéreo del Viejo Continente. En la “lista negra” están incluidas actualmente aerolíneas de 23 países, entre ellos: Rusia, Venezuela, Irán, Libia, Corea del Norte, Armenia, Afganistán, Irak y República Democrática del Congo, entre otros.
Cómo fue el accidente que dejó al menos 68 muertos en Nepal
El avión se estrelló cerca de las 11 de la mañana de Nepal –a las 2.15 de la madrugada en Argentina–. Allí viajaban 68 pasajeros –6 de ellos, menores de edad– y 4 tripulantes –2 pilotos y 2 azafatas–, de acuerdo a la información de la aerolínea Yeti Airlines.
Además del argentino, había otros 14 extranjeros: cinco indios, cuatro rusos, dos coreanos, un australiano, un irlandés y un francés, detallaron desde la aerolínea. Pokhara es un punto de paso importante para peregrinos y montañistas de otros países.
Según informó el funcionario policial AK Chhetri, se llevaron 31 cadáveres a los hospitales. Además, en el barranco donde cayó el fuselaje incendiado, ubicado entre el antiguo aeropuerto de la ciudad y el nuevo –inaugurado hace dos semanas–, se encontraron otros 36 cuerpos de personas que viajaban en el ATR 72 propulsado por dos motores turbohélice.
"El aparato se estrelló en un barranco, así que es difícil sacar los cuerpos. La operación de búsqueda y rescate continúa. De momento no se han encontrado supervivientes", comunicó a AFP un portavoz del ejército, Krishna Prasad Bhandari.
Después del accidente, decenas de rescatistas y personas se acercaron para tratar de mitigar el fuego que habían dejado los restos de la nave.