Las autoridades de Nepal confirmaron el hallazgo de las cajas negras y la muerte de 69 víctimas en la peor de las catástrofes aéreas en el país desde 1992, además que descartaron que puedan encontrarse sobrevivientes. Resta hallar aún tres de las 72 personas que se encontraban en la aeronave. Nepal decretó este lunes un día de luto nacional tras el desastre aéreo.
"Rezamos por un milagro. Pero la esperanza de encontrar a alguien con vida es nula", declaró Tek Bahadur KC, jefe del distrito de Taksi, en Pokhara (centro), donde se estrelló el domingo el avión con 72 personas a bordo, 68 pasajeros y cuatro tripulantes.
El bimotor ATR 72 de la compañía Yeti Airlines procedente de Katmandú cayó a tierra poco antes de las once de la mañana hora local (05H15 GMT) cerca del aeropuerto de Pokhara, puerta de entrada de senderistas de todo el mundo.
La aeronave en llamas fue encontrada en un precipicio de 300 metros de profundidad, entre el antiguo aeropuerto construido en 1958 y la nueva terminal internacional inaugurada el 1 de enero.
Soldados usaron cuerdas para recuperar los cuerpos del fondo del barranco. A bordo del avión iban 15 extranjeros: cinco ciudadanos de India, cuatro rusos, dos coreanos, una argentina, un australiano, un irlandés y un francés, precisó el portavoz de la aerolínea, Sudarshan Bardaula.
La pasajera argentina fue identificada como Jannet Sandra Palavecino, de 58 años, madre de dos hijas y oriunda de la provincia de Neuquén. Tras el accidente, los rescatistas trataron de sofocar el fuego entre los restos del aparato, propulsado por dos motores turbohélice.
Dolor de los familiares
La razón del accidente no se conoce aún, pero en un video compartido en las redes sociales, verificado por un socio de AFP, se ve al avión volando a baja altura sobre un zona de viviendas antes de inclinarse de manera brusca a la izquierda, tras lo cual se oye una fuerte explosión.
Greg Waldon, experto del sector aéreo, declaró que al ver el video le pareció que una de las alas del avión repentinamente "entró en pérdida", es decir que perdió la capacidad aerodinámica de mantener la máquina en el aire.
"Cuando usted está a baja altitud y enfrenta un incidente como ese... es un problema muy serio", dijo Waldon, editor para Asia de la publicación FlightGlobal.
Raj Dhungana, tío de Sangita Shahi, una de las víctimas mortales del accidente, habló del "dolor" de toda la familia delante de un hospital de Pokhara.
"Mi sobrina era muy talentosa. Era también una excelente estudiante. Estudiaba en Katmandú. Dirigía un centro de maquillaje y una plataforma comercial en línea (...) Dios se llevó a alguien tan bueno", declaró a la AFP.
En un comunicado fechado en Toulouse, en el sudoeste de Francia, ATR, el fabricante del avión, precisó que se trataba de un modelo 72-500, y agregó que sus especialistas estaban "plenamente comprometidos para apoyar tanto la investigación como el cliente", Yeti Airlines.