Si bien Oxfam no se especializa en cuestiones tributarias, como otras ONG como TJN, desde su fundación en 1995 promueven acciones concretas de política y ejercitan labores de ayuda humanitaria. Concretamente en su último informe, “La ley del más rico”, proponen una serie de medidas de política para la región latinoamericana encaminadas a gravar la riqueza extrema con el objetivo de reducir las desigualdades sociales. Allí sostienen que:
- Es vital aplicar medidas tributarias de emergencia, temporales y excepcionales, como los impuestos a las sobre ganancias empresariales, que permitan generar recursos adicionales para ser reinvertidos en planes de contención y mitigación para quienes más lo necesitan, dado el contexto actual con altos niveles inflacionarios (el aporte solidario de Argentina es mencionado como ejemplo).
- Aplicar impuestos al patrimonio en todos los países, para reducir sistemáticamente la riqueza extrema, la concentración del poder y las desigualdades. Esto debe realizarse en forma recurrente.
- Elevar la tributación sobre las rentas del capital y ganancias financieras para equipararlas al menos a las rentas del trabajo en su nivel de tratamiento fiscal.
- Incrementar la tributación sobre la renta del 1 por ciento más rico, incluyendo tanto las rentas del trabajo como las del ahorro; aplicando, por ejemplo, un tipo impositivo cercano al 60 por ciento. En cambio, es vital eliminar cualquier exoneración que beneficie al 1 por ciento más rico. Se recomienda impulsar impuestos a las herencias, donaciones y sucesiones también de forma sistemática.
- Promover un gran acuerdo fiscal latinoamericano con el objetivo de ampliar la cooperación y la coordinación de políticas tributarias entre los países de la región, con medidas para afrontar la evasión y los paraísos fiscales, así como impulsar la revisión de los beneficios tributarios ineficientes. Este acuerdo deberá servir de impulso a la construcción de un sistema fiscal global y regional más incluyente, sostenible y equitativo.