En medio de la suba del dólar blue, el ministro de Economía, Sergio Massa, anunció que el Gobierno avanzará en el proceso de recompra de deuda externa por U$S 1.000 millones. La medida llega luego de varias semanas de fuerte suba de la divisa norteamericana en el mercado paralelo, del orden de los $32. En diálogo con Página|12, varios economistas calificaron la medida como “positiva” y explicaron cómo impactará en las finanzas. En la apertura de los mercados, los bonos que cotizan en el exterior registraron fuertes subas, cercanas al 11%.
Suben los bonos tras los anuncios de Massa
Los bonos soberanos argentinos que cotizan en la bolsa de Wall Street treparon hasta un 11 por ciento en los minutos posteriores al anuncio del ministro de Economía, que buscó calmar de este modo la fuerte suba del dólar paralelo, que desde el inicio de 2023 aumentó $32. Además, Massa indicó que el objetivo es “mejorar el perfil de deuda y seguir bajando el riesgo país”.
Hasta el mediodía, los principales aumentos se registraban en la cotización del Global 2035 (GD35), con 4,8%; seguido por el Global 2029 (GD29), con un 7,02% y el Global 2030 (GD30), con un 6,00%. Además, el Global 2038 (GD38) se incrementaba en el orden del 3,6% y el Global 2041 (GD41), en el orden del 3,1 %.
El impacto del anuncio de Sergio Massa
En diálogo con Página|12, el director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), Hernán Letcher, afirmó que el anuncio de Massa busca estabilizar la brecha que existe entre los diversos tipos de cambio alternativos. “Pueden pasar dos cosas: que la intervención o recompra de los bonos por parte del Estado sea un mecanismo que permita darle salida a quienes se quieren dolarizar; o que genere un efecto contrario sobre la paridad de los bonos, se estabilice la brecha y los valores de los dólares alternativos”, indicó.
Letcher se mostró optimista por la intervención anunciada por Massa en el mercado financiero y consideró que puede tener un “efecto positivo” en la reducción del riesgo país – que cayó por debajo de los 2.000 puntos básicos este 18 de enero y se ubicó en 1.881 -, pero también en la estabilización del dólar contado con liqui, el dólar MEP – o dólar bolsa – y en la brecha sobre los distintos tipos de cambio “si efectivamente genera un efecto contagio sobre los agentes del mercado”, según la visión del economista.
Deuda, el lastre heredado del macrismo
Para Ana Paula Di Giovambattista, economista de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET), la estrategia del Ministerio de Economía busca cambiar el perfil de los vencimientos de deuda externa de los próximos años. “Hay que considerar que mientras en 2022 la deuda en moneda extranjera implicó el pago de capital e intereses por 1,6 millones de dólares, entre 2023 y 2026 será de 6 mil millones”, indicó.
“El proceso de recompra busca que la deuda externa de corto plazo pase de manos privadas a actores del sector público. Esto debería reflejarse en los mercados a partir de una reducción del riesgo país”, planteó, y sostuvo que la estrategia busca enfrentar el condicionante de la restricción externa, un problema estructural de la Argentina, agravado durante la gestión macrista por la millonaria deuda contraída con el FMI. “La deuda es el principal problema a enfrentar para pensar en una estrategia de crecimiento sostenido en el mediano plazo”, agregó la economista, consultada por Página.
Por su parte, el economista Sergio Chouza, director de la consultora Sarandí, afirmó que el objetivo de Massa es “darle un envión a la baja del riesgo país, que se viene verificando por las mejoras de las condiciones macroeconómicas. “Muy probablemente genere un aumento en los precios de los bonos. En términos macro, termina siendo un desendeudamiento indirecto”, remarcó.
En este sentido, Chouza afirmó que al recomprar deuda quedan menos vencimientos con acreedores privados y más deuda intra-sector público. “Es una medida positiva y muy promisoria para el país”, enfatizó el economista, que consideró además que estaban dadas las condiciones para avanzar en la recompra de deuda por los precios que había alcanzado. “Es una muy buena noticia”, consideró.
En tanto, para Joel Lupieri, analista de Epyca Consultores, “suena arriesgado hacer utilización de recursos en un contexto donde no habrá abundancia de dólares para 2023”. “Estás pagando valor presente de una deuda que vencía en seis años. Cierto es que las paridades son bajas, pero si ese es el objetivo, se tendría que haber hecho antes del rally de bonos de las últimas semanas”. De todos modos, consideró que “es claro que la medida busca descomprimir la suba de los dólares bursátiles”.
Cruces desde el oficialismo
Para el exdirector del Banco Nación Claudio Lozano la medida es una “operación de cosmética financiera con efectos de cortísimo plazo”, para “seguir surfeando en el escenario donde las razones que hicieron posible la crisis de junio y la salida de Martín Guzmán siguen sin solución”, entre las que enumeró la desaceleración de la actividad económica y el deterioro de los indicadores sociales. “Apretado por la brecha cambiaria se inmolan 1.000 millones de dólares necesarios para la actividad productiva, con el objeto de dar señales a los mercados financieros”.
“Las pocas reservas que se recuperaron en base a subsidiar con más de 600.000 millones de pesos a los dueños de la soja y con más endeudamiento, no sólo se regalan a dólar barato y a pérdida del tesoro a los importadores, sino que ahora le vamos a comprar a los dueños de la deuda una deuda que los argentinos jamás disfrutamos, que jamás debió haber sido reconocida y que debió investigarse antes de comenzar a pagar lo que correspondiere”, remarcó Lozano.
En este sentido, cuestionó al Gobierno porque “la única señal que le preocupa a esta política es calmar a los mercados, para que vuelvan a prestarnos y resolvamos nuestra deuda con un nuevo endeudamiento”. “Acá no hay desarrollo ni solución a los problemas de los argentinos. Si queremos domar el dólar hay que disciplinar a los exportadores, controlar y administrar el comercio exterior, declarar la emergencia cambiaría, aplicar la ley penal cambiaría, recuperar los puertos y decidirnos a emprender un camino distinto”.
Por su parte, la exdiputada Fernanda Vallejos también advirtió por el impacto de la medida anunciada por Massa, aunque señaló que la recompra de deuda se da en un contexto complejo, de alta especulación en los mercados paralelos del dólar, que choca de frente con la gestión antiinflacionaria, atravesada por los vaivenes cambiarios.
En declaraciones a Página/12, Vallejos sostuvo que es un riesgo desprenderse de 1.000 millones de dólares de las reservas del Central, aunque remarcó que se debe tomar en cuenta que la economía argentina está condicionada por los altísimos niveles de endeudamiento, "con una responsabilidad mayúscula del macrismo, pero también con una responsabilidad de la anterior gestión económica del Frente de Todos", sostuvo en alusión al saliente Guzmán.
"Todas las medidas se dan en ese marco y en un contexto social donde no se puede perder de vista que la recomposición del ingreso de los trabajadores debe ser prioridad. Administrar la cuestión financiera y cambiaria procurando equilibrios que permitan sostener un sendero de paulatina baja de la inflación a mi juicio es crítico", enfatizó.
El macrismo, aferrado al libreto del déficit fiscal
El economista y diputado nacional por Juntos por el Cambio Martín Tetaz salió al cruce de la medida y comparó el anuncio de Massa con “pagar la tarjeta de crédito ni bien cobrás el sueldo”: “La pagaste por anticipado y todavía no vencía, pero a fin de mes la vas a reventar”, indicó, ante la consulta de este medio.
Para Tetaz, el único anuncio que puede cambiar las expectativas es el de un resultado fiscal esperado. “Que el gobierno recompre deuda en un trimestre bueno para las finanzas públicas es algo transitorio y de corto plazo”, reconoció, e insistió con el libreto opositor de reducción drástica del déficit fiscal, sin gradualismo. “Todos saben que la Argentina tiene que incrementar su deuda, se quiera o no, va a subir la deuda pública. El gobierno utiliza esta herramienta para intervenir en el mercado de cambios”, agregó.