En el marco de un espectacular megaoperativo montado por las fuerzas de seguridad, el contador de la familia Kirchner, Victor Manzanares, fue trasladado de Río Gallegos a la Ciudad de Buenos Aires, donde quedará alojado en el penal de Marcos Paz por orden del juez federal Claudio Bonadío. Con casco, chaleco antibalas y custodiado por uno 70 agentes, Manzanares arribó ayer a Aeroparque, donde recibió un tratamiento más estrambótico que el que tuvo el narco colombiano Mi Sangre, extraditado a Estados Unidos. “Víctor Manzanares es simplemente un contador que tiene la familia desde hace muchísimos años y que en definitiva no hace otra cosa que cumplir con su trabajo, o sea presentar declaraciones juradas y cobrar alquileres”, señaló su abogado Carlos Beraldi, que también representa a la ex presidenta Cristina Fernández. El letrado aseguró que se trata de “una maniobra de corte electoral, claramente de corte político” y reclamó que su defendido sea indagado rápidamente para “acabar con todas estas calumnias y especulaciones”. Además, la defensa planea denunciar por “extorsión” tanto a Bonadío, como a los ministros de Justicia, Germán Garavano, y de seguridad, Patricia Bullrich.
Luego de pasar casi quedar detenido el lunes en Santa Cruz, Manzanares llegó ayer a Buenos Aires para notificarse de los delitos que se le imputan. Llegó al Aeroparque Jorge Newbery a las 12:09 en un vuelo de Aerolíneas Argentinas y fue trasladado a Comodoro Py en el marco de un enorme operativo que incluyó fuerzas especiales del Servicio Penitenciario Federal. Bonadio lo acusa al contador de intentar evadir el embargo que le trabó a la ex presidenta en la causa Los Sauces mediante el supuesto desvío de fondos de alquileres a una cuenta no identificada en la intervención decretada en la causa.
“El juez que actúa con reparto político y en el que la aplicación de la ley ha quedado totalmente olvidada”, retrucó ayer Beraldi, quien explicó que cómo fue el procedimiento realizado por Manzanares: “no hizo más que cumplir con su trabajo: pidió que los alquileres que se debían al Condominio fueran pagados (...) en un banco para que quede debida constancia de ello. Si hubiesen querido hacer un by pass lo hubieran colocado en otro lugar”. “Todos los fundamentos de legalidad y normalidad estaban totalmente cumplidos”, fundamentó.
“Lo que quieren es confundir a la gente volviendo con la cuestión de que hay hechos gravísimos de corrupción”, insistió Beraldi, en alusión a la intencionalidad del cuestionado Bonadio, en su constante intento de mellar la figura de la ex presidenta que encabeza todas las encuestas de intención de voto para las próximas PASO en la provincia de Buenos Aires, el principal distrito electoral.
En este sentido, aseveró que la intención de esta causa es que Manzanares declare “algo en contra” de Fernández de Kirchner. “Pero no lo van a lograr. Esto les va a salir mal y la gente no va a poder ser engañada con esta cuestión”, remarcó.
Además de haber apelado la detención ante la Cámara, la defensa de Manzanares adelantó que denunciarán a Bonadio, Garavano y Bullrich por “extorsión”, ya que fuentes del gobierno dejaron trascender que su detención en Marcos Paz es una forma de “presión”.