El Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) trabaja por estas horas en los últimos detalles de una resolución que obligará a las operadoras de telefonía móvil a mejorar su sistema de seguridad y agregar el reconocimiento biométrico para los cambios de tarjeta SIM.
El objetivo ese evitar los casos de robo de identidad y hackeo, mecanismo también conocido como “SIM Swapping”. Con esta modalidad, aseguraron el ministro porteño, Marcelo D´Alessandro y el diputado Diego Santilli, fueron supuestamente engañados y algunos de sus chats dados a conocer.
Además, es una modalidad que se usa con frecuencia para ingresar de manera ilegal a las billeteras virtuales de las personas que, momentáneamente, pierden el control de su número de teléfono y, por lo tanto, el acceso a los canales de doble verificación vía SMS.
De hecho, la resolución saldrá tras un requerimiento de la jueza federal María Servini de Cubría para impedir el hackeo de los teléfonos celulares a través de este método.
Cómo funciona el SIM Swapping
Para llevar a cabo la estafa, quien realiza el SIM Swapping suele comunicarse con la empresa proveedora y denunciar una supuesta destrucción o extravío de la tarjeta en cuestión.
Con esto, y por las pocas comprobaciones que suelen hacer las empresas, con preguntas fáciles de responder sobre la información personal, se logra transferir la cuenta a otra tarjeta SIM.
Por eso, y con el objetivo de evitar este tipo de estafas, el Enacom está evaluando alternativas para reemplazar las preguntas básicas que se realizan desde las compañías por un sistema de reconocimiento facial.