Estados Unidos y Alemania anunciaron este miércoles que enviarán tanques a Ucrania como parte de un esfuerzo coordinado para suministrar a Kiev armas pesadas justo cuando la guerra con Rusia está por cumplir un año. Ucrania y sus aliados saludaron la decisión, pero Rusia la denunció como una escalada "extremadamente peligrosa" y "un plan destinado al fracaso".
El presidente Joe Biden dijo que Estados Unidos entregará 31 tanques Abrams M1, luego de meses de que su gobierno argumentara que esos blindados eran demasiado difíciles de operar y mantener para las tropas ucranianas. Biden aseguró que los aliados europeos de Estados Unidos, entre ellos Reino Unido y Francia, acordaron enviar a Ucrania suficientes tanques como para equipar dos batallones ucranianos, o sea 62 tanques en total.
Tanques Leopard
La decisión del mandatario estadounidense llegó luego de que Alemania anunciara que enviará a Ucrania 14 tanques alemanes Leopard 2 A6 y aprobará pedidos de otros países para hacer lo mismo, tras semanas de resistencia y presiones de sus aliados europeos. El Leopard es un tanque pesado que según los especialistas podría romper las líneas rusas en el este de Ucrania. Esos tanques están muy extendidos por Europa, pero para ser enviados a Kiev era necesaria la autorización de Alemania.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, sostuvo que los anuncios de Estados Unidos y Alemania eran un "paso importante hacia la victoria" de su país sobre Rusia. "Ahora el mundo libre está unido como nunca antes en aras de un objetivo común, la liberación de Ucrania de los invasores. ¡Seguimos adelante!", escribió Zelenski en su cuenta de Twitter.
Frente al agradecimiento de Ucrania por recibir carros de combate modernos de Occidente, el Kremlin aseguró que "es un plan destinado al fracaso". El vocero del gobierno ruso, Dmitri Peskov, sostuvo que los suministros de carros de combate están "sobrevalorados" y no darán a las Fuerzas Armadas ucranianas la ventaja deseada. Además Peskov reiteró que los tanques occidentales "arderán" en Ucrania, al igual que lo han hecho otras armas extranjeras.
El embajador ruso en Berlín, Serguéi Nechaev, planteó que Alemania renunció definitivamente a "su responsabilidad histórica", en alusión a la Segunda Guerra Mundial. Según Nechaev, se trata de una "decisión extremadamente peligrosa" que "lleva el conflicto a un nuevo nivel de confrontación".
Sobre el terreno la guerra se encuentra mayormente estancada, aunque en medio de condiciones invernales que dificultan las operaciones. El Ejército ucraniano admitió haberse retirado de Soledar, 15 días después de que Rusia afirmara que ya controlaba esa localidad de la provincia oriental de Donetsk, que está en su mayor parte bajo dominio del Ejército ruso desde hace meses.
Soledar se encuentra cerca de Bajmut, una ciudad que Rusia lleva meses tratando de tomar. Las tropas rusas afirmaron haber avanzado con ese objetivo este miércoles.