Les 31 diputades que integran la comisión de Juicio Político respiran la cuenta regresiva del inicio del debate con sus libretos ya preparados. El jueves a las 11 comenzará a tratarse el pedido de destitución de los cuatro jueces de la Corte Suprema y tanto el Frente de Todos como Juntos por el Cambio aprovecharon la previa para terminar de pulir sus estrategias para cuando se enfrenten por primera vez en la arena del Anexo de la Cámara de Diputados. El primer encuentro será más bien una formalidad y, para afuera, tanto oficialismo y oposición insisten en que asistirán con los mejores modales. "Pero depende de cómo actúen ellos. Si dicen algo vamos a responder", aclaran rápidamente (y usando las mismas palabras), legisladores del FdT y JxC. La jornada no fue todo Juicio Político, sin embargo. Y es que entre reuniones, negociaciones y llamados telefónicos, el oficialismo se anotó su primer triunfo en estas sesiones extraordinarias, logrando sortear el bloqueo de JxC dictaminando una iniciativa en la comisión de Recursos Naturales.
La Cámara de Diputados ofreció una postal atípica para un día de enero: desde temprano a la mañana, diversos legisladores oficialistas y opositores pululaban por los pasillos del Palacio, entrando y saliendo de sus despachos, de a grupos y solos. En el tercer piso, el FdT encabezó al mediodía una amplia reunión con las autoridades del bloque y les presidentes de las comisiones intervinientes en el temario de extraordinarias con el objetivo de buscar estrategias que permitieran sortear la vocación obstruccionista de JxC. Fue, por un lado, una oportunidad para hacer catarsis, pero también un espacio para concebir acciones que permitiesen evitar el final anunciado de la parálisis total del Congreso.
El encuentro sirvió también para terminar de pulir el plan de acción frente al comienzo del juicio político a los jueces de la Corte por "mal desempeño", que incluirá el tratamiento de unos 14 expedientes (el martes se sumaron dos más: uno contra Horacio Rosatti del abogado Pablo Llonto y otro contra los cuatro supremos de Diego Sánchez). El objetivo del FdT es que esta primera reunión tenga solo a Carolina Gaillard - presidenta de la comisión - brindando algunos detalles sobre el cronograma de trabajo, cumpliendo un rol informativo y formal que prepare al resto de les integrantes de la comisión sobre cómo se desarrollará un debate que, para algunes, se extenderá por 90 días y, para otres, hasta que cierren las listas electorales. El plan del jefe de bloque, Germán Martínez, es ir avanzando cautelosamente, evitando que lluevan impugnaciones. "Nosotros vamos a ir tranquilos, pero si ellos arrancan con los cuestionamientos y los pedidos nulidad nosotros no nos vamos a quedar callados", planteó un diputado kirchnerista.
Una postura similar adoptó JxC, quien mantuvo en paralelo su propia cumbre para terminar de definir una estrategia común. El interbloque opositor se enfrentaba a una disyuntiva: ¿cuál era el mejor plan de acción para defender a Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda (el caso de Ricardo Lorenzetti no es unánime)? Un sector pugnaba por salir a confrontar con dureza al FdT, lloverles con pedidos de nulidad: "sumarse al show", como precisó un vocero del interbloque. Otres diputades, en cambio, insistían en que había que encarar el debate con cautela, hacer todo lo posible para terminar con el proceso de expulsión de los jueces lo antes posible. En principio, terminó predominando la segunda opción: "Tenemos que evitar que se prolongue la investigación", precisó un diputado del PRO que participó del encuentro.
"Vamos a buscar cambiar la agenda instalando otros temas para no hacerle el juego al oficialismo", precisó una fuente del bloque radical (que preside Mario Negri, integrante también de la comisión de Juicio Político). Por más que la coalición opositora resolvió apurar los tiempos y "no subirse al circo", ya varios diputados empezaron a anticipar que van a presionar para que se convoque al ministro de Economía, Sergio Massa, como testigo. "Massa había dado a entender que no compartía el juicio político, que explique sus razones", sostuvo un vocero de JxC, dando cuenta de que hay varios dirigentes de la coalición opositora que no renuncian todavía a la posibilidad de armar su propio circo.
Show sí o show no, la reunión del jueves a las 11 no tendrá como objetivo exponer las distintas causales - fallo del Consejo de la Magistratura y de la coparticipación porteña, chats de Silvio Robles y Marcelo D'Alessandro, caso "Muiña" del 2x1 a los genocidas, entre otros -, sino que eso será tarea de la reunión del 2 de febrero. Ese día será turno para que les autores de los 14 pedidos de juicio político expongan y defiendan sus iniciativas. La diputada de la Coalición Cívica, Paula Oliveto, será una de esas expositoras. Y es que si bien JxC está denunciando, hace semanas, sobre los peligros de la avanzada del gobierno sobre el Poder Judicial, existe un sector de la coalición opositora que viene impulsando hace tiempo la destitución de Lorenzetti. "La diferencia es que nosotros no discutimos el contenido de los fallos, es por la administración de los fondos cuando era presidente de la Corte", aclaró una espada de la CC.
Luego, el 9 de febrero, se buscará aprobar la admisibilidad del juicio político. Serán cuatro dictámenes distintos - uno por cada juez del Máximo Tribunal - que, una vez que comience el período sumario, se irán tratando uno por uno de manera separada. Además de convocar a testigos - Robles y D'Alessandro serán los invitados estrella -, el FdT analiza otras medidas de prueba (entrecruzamientos de llamadas, acceso a documentación del Poder Judicial, secuestro de teléfonos). El problema es que existen pruebas que solo se pueden acceder a través de la orden de un juez y desde el FdT anticipan que no habrá muchos jueces que quieran cooperar con una investigación contra los jueces de la Corte. Por este motivo, algunos diputados como Rodolfo Tailhade están analizando alternativas que permitan sortear el filtro de la orden judicial.
Prueba de fuego en la Comisión de Recursos Naturales
En simultáneo, en el Anexo de la Cámara de Diputados se estaba llevando a cabo la primera reunión de comisión del período extraordinario. En un anticipo de lo que será la estrategia del oficialismo para encarar el bloqueo opositor, Leonardo Grosso convocó a la comisión de Recursos Naturales para tratar un proyecto con media sanción del Senado que crea el Parque Nacional El Palmar en la provincia de Chaco. El FdT no contaba con la mayoría en esa comisión - 15 diputades eran del oficialismo (uno de ellos es Máximo Kirchner), 15 de JxC y una era del Interbloque Federal -, pero gracias a la participación de Graciela Camaño logró alcanzar el quórum y dictaminar el proyecto. Algunas diputadas de JxC, incluso, se sentaron a participar del debate luego y firmaron el dictamen de mayoría. "Se rompió rápido el bloqueo opositor", ironizó un diputado oficialista.
Mientras la comisión se desarrollaba, el bloque oficialista emitió un comunicado dando cuenta que, hasta febrero, buscarían darle tratamiento a todos los proyectos de extraordinarias. El dictamen de la comisión de Recursos Naturales fue un primer paso. "Hoy quedo claro que no está todo inmovilizado", afirmó, optimista, una espada del FdT.