A lo largo del año pasado, la generación de energía en base a las represas hidroeléctricas registró un incremento del 25,2 por ciento, mientras que las energías renovables avanzaron un 10,9 por ciento interanual. En cambio, el aporte de la energía nuclear registró una retracción del 26,6 por ciento y la proveniente de fuentes térmicas, principalmente gas natural y combustibles líquidos, cayó un 9,2 por ciento.
De acuerdo a los datos suministrados por la Compañía Argentina del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa), la matriz eléctrica nacional logró mejorar la participación de las fuentes energéticas más limpias en un contexto de crecimiento de la demanda, que alcanzó los 138.755 gigavatios/hora (Gwh), lo cual implicó un incremento del 3,6 por ciento en relación a los datos correspondientes a 2021.
En tanto, la potencia máxima alcanzada en 2022 es el récord del sistema, con 28.283 MW. El incremento promedio de la demanda, de 3,6 por ciento, fue bastante superior en los meses de mayor consumo, como los de pleno invierno y pleno verano, cuando la suba anual llegó a tocar el 7 por ciento. El alza se explica por el crecimiento de la economía y la paulatina incorporación de equipos de climatización.
Según el detalle de Cammessa, "el incremento en la demanda fue cubierto por mayor generación hidro, desde mitad de año con mayores caudales especialmente por parte de Yacyretá y Salto Grande, mayor generación renovable con nueva nueva potencia y un crecimiento medio alrededor de 200 MW medios, y el aumento de la importación de energía, aumentando casi 5.500 GWh (630 MW medios) en relación al año 2021".
En cambio, la generación térmica tuvo una caída anual del 9,2 por ciento anual, aunque esa modalidad se mantuvo como la principal, con el 56,4 por ciento del total. La principal incidencia en dicha caída de participación respondió a la menor disponibilidad de gas natural y los costos de los combustibles. "Si bien el barril de petróleo terminó el año un 43 por ciento promedio mayor al año anterior, la mayor diferencia se presentó en el primer semestre, alcanzando una suba del 70 por ciento en invierno, indicador relacionado al comportamiento de los precios internacionales".
En el caso de las energías renovables (biomasa, eólica, solar, biogás y emprendimientos hidroeléctricos de menos de 50 Mw), alcanzaron una participación del 13,9 por ciento en la atención de la demanda.