La protagonista de Soy extraordinaria (reciente estreno de Star+) comparte su ADN con el de la Mirabel de Encanto bajo el contexto y la tirria con la que se despachaba Misfits. En un mundo donde al llegar a la mayoría de edad todos obtienen superpoderes, Jen (Máiréad Tyers) sigue esperando por el suyo. El catalizador de la ficción no será demasiado original, aunque sus ocho episodios destilan una irreverencia que deja mal parado a The Boys. Todo a partir de seguir el día a día de una irlandesa de 25 años que vive en una Londres apenas un poco más bizarra que la real. “Tuve la idea, un día, de tomar el género que siempre trata sobre ser el mejor héroe, el más rápido y el más fuerte, ¡y combinarlo con idiotas completamente inútiles!”, planteó su creadora, Emma Moran.
El mejor chiste de Soy extraordinaria es que los demás tampoco la pasan demasiado bien. Su mejor amiga se comunica con los muertos y trabaja para un estudio de abogacía, otro roomie puede viajar al pasado como quien rebobina con el control remoto y en su depto aparece un hombre gato que no sabe cómo abrir una lata de atún. Más allá del catálogo de habilidades que desfilan por aquí, lo verdaderamente atractivo es su mirada millennial e inconforme. Como tener sexo con un chico que genera orgasmos al mínimo contacto, pero de algún modo queda insatisfecha.