En “la Argentina siempre está el aporte de la deforestación y el mal manejo de los cultivos”, aseguró el viceministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Sergio Federovisky, en referencia a la sequía, y los focos de incendios forestales que se encuentran activos en el país.

“Una de las consecuencias más visibles que se están comprobando es lo que se conoce como ‘la agudización de los extremos’, es decir, fenómenos que siempre existieron pero que aparecen más agudos, más rotundos, más violentos y más recurrentes”, como sucede con la sequía detalló el funcionario. 

Estado y productores deberían “vislumbrar cuál es el escenario futuro” que plantea el cambio climático, para pensar las prácticas “para aplicar en la producción agropecuaria para adaptarnos”.