"Si no aparece otro candidato de nuestra generación que mida mejor, yo voy a jugar, porque nosotros no vamos a militar ni a Alberto Fernández ni a Sergio Massa", sentenció el referente del MTE, Juan Grabois, al anunciar que presentará su precandidatura presidencial para jugar la interna en las PASO del Frente de Todos. Grabois aseguró que ya habló la presentación de su precandidatura con el Presidente y con la vicepresidenta, Cristina Kirchner, y señaló que ambos "están de acuerdo".
Grabois indicó que presentará su precandidatura para disputar la interna de la coalición oficialista en caso de que el ministro del Interior, Eduardo "Wado" De Pedro, no se presente, y mencionó que el otro candidato podría ser el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, aunque consideró que "no se tiene que mover de la Provincia".
El dirigente del Frente Patria Grande, en una entrevista a Infobae, señaló que se mantendrán dentro del Frente de Todos excepto que se impongan como candidato el presidente o el ministro de Economía, Sergio Massa, sin recurrir a la herramienta de las PASO. "No vamos a aceptarlos como candidatos", sentenció en el caso de que se busque evitar la interna.
Contando con la resolución de la candidatura presidencial a través de las PASO, Grabois defendió el sostenmiento del Frente de Todos como coalición para enfrentar a Juntos por el Cambio. "Massa, Cristina, Alberto, Grabois, somos una limitación valida contra la derecha ‘bolsonarista’ que en nuestro país expresa el macrismo. Nosotros nos oponemos a eso", aseguró.
Un candidato de la generación Grabois: "Kicillof o Wado de Pedro"
"No nos sentimos representados por ellos", indicó el referente del Frente Patria Grande en relación a Fernández y Massa y eligió ubicarse en la verdad de De Pedro y Kicillof. "Queremos que exista esa persona, que haya un candidato competitivo de nuestra generación. Yo no puedo hablar en nombre de nadie y tampoco me gusta nombrar tanto, pero Axel (Kicillof) y Wado son eso", sostuvo el hombre del MTE, en diálogo con Radio 10, horas antes.
Grabois prefirió no hablar por los otros posibiles precandidatos, pero consideró que "Axel se tiene que quedar en Provincia (de Buenos Aires) y no se tiene que mover de Provincia", mientras que aseguró que De Pedro —quien ayer aclaró su cruce público con el Presidente— tiene que presentarse como precandidato presidencial del Frente de Todos. "Yo creo que sí, pero no puedo hablar por él. Por ahora, si él no está soy yo, porque si no aparece otro yo voy a jugar", aseguró.
El dirigente señaló que su frente se retiraría de la coalición en caso de no que se realizarán unas PASO, pero que también respaldaría a Fernández en una segunda vuelta luego de realizar un acuerdo programático y ensayó una suerte de plataforma electoral esencial: "Ley de Tierra, Techo y Trabajo, monotributo gratuito para los trabajadores informales y, entre otros puntos, la generación de un millón de lotes productivos para pequeños productores".
Grabois aseguró que la presentación de un precandidatura presidencial no se trata de una respuesta repentina sino que es algo que charló con el presidente Alberto Fernández en la residencia presidencial de Chapadmalal y que también lo habló con la Cristina. "Lo hable con ella. Lo hablé con todo el mundo y todos, incluida Cristina, están de acuerdo", aseguró a Infobae.
"Si uno se enoja con Alberto, le recomiendo que mire una foto de Macri"
A pesar de marcas sus diferencias con parte de la coalición gobernante, Grabois planteó la necesidad de sostener el Frente de Todos bajo las condiciones planteadas e incluso pidió morigerar las peleas internas durante el año electoral. "Si uno se enoja con Alberto, una de las terapias que yo recomiendo es que mire una foto de Macri. Cuando me agarra mucha bronca con Alberto por alguna cosa que pienso que está mal, agarro una foto de Macri, la miro y se me baja un poco la bronca", propuso Grabois.
El dirigente del MTE reinvindicó la continuidad del Frente de Todos para poner un freno a Juntos por el Cambio y la derecha ultraliberal de Javier Milei. "En un contexto donde no existiera la amenaza de una derecha violenta, recalcitrante al estilo bolsonarista, muchos pensaríamos que no hay necesidad de hacer una coalición de estas características", reconoció.
En ese sentido, Grabois recomendó "no entrar en una dinámica de discusión y reproche en 2023 porque no es constructivo" y analizó que hasta "2022 estaba bien matarse por sus convicciones porque eso definía algunas políticas públicas, pero ahora hay un objetivo principal que es ganar".