Un desprendimiento de hielo y piedras mató este martes a un turista y dejó a otro herido en El Bolsón, Río Negro. La tragedia ocurrió mientras los viajeros recorrían el sendero del cerro Hielo Azul, en una zona cercana a las cuevas del Glaciar Hielo Azul. Los primeros en llegar al lugar fueron agentes de Defensa Civil, pero el hombre ya había fallecido.
Desde el cuerpo de Bomberos de El Bolsón, precisaron que el hombre fallecido tenía 42 años, era oriundo de Caleta Olivia, Santa Cruz, y se encontraba de vacaciones junto a su esposa en la Cordillera. Según medios locales, no conocía al turista que resultó herido.
Por su parte, el turista que sobrevivió al accidente sufrió politraumatismos en una pierna y un brazo, también tiene 42 años y estaba de viaje con su pareja. Debió ser trasladado en helicóptero hasta el hospital zonal por agentes del Sistema Federal de Manejo del Fuego.
La persona responsable del Refugio del Hielo Azul fue la primera que alertó la situación, intentó auxiliar al turista y contactó a Bomberos y Defensa Civil. Luego de casi 10 horas de trabajo, el equipo de rescatistas logró sacar de debajo del hielo y las piedras al hombre fallecido.
Qué pasa con los Glaciares y el calentamiento global
La mitad de los glaciares de la Tierra están amenazados por el calentamiento global, según un estudio publicado los primeros días de enero del 2023 en la revista Science. Sus autores advierten sobre la importancia de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para limitar el derretimiento de los glaciares y el consecuente aumento del nivel del mar.
Si el aumento de la temperatura media del planeta aumenta solo 1,5 °C respecto a los niveles preindustriales -el objetivo más ambicioso del acuerdo de París- el 49% de los glaciares del mundo desaparecerán, advirtieron los autores del informe.
Una pérdida como esa representará cerca del 26% de la masa total de hielo, pues los primeros en derretirse serán los más pequeños. En ese escenario, los investigadores estiman que el nivel del mar subirá unos nueve centímetros, un aumento al que se sumará el deshielo en los casquetes polares.
De momento, el mundo se encamina hacia un calentamiento de 2,7°C, que conduciría a un deshielo casi total en Europa Central, el oeste de Canadá y Estados Unidos, e incluso en Nueva Zelanda.