El ex diputado nacional y funcionario de Juan Manuel Urtubey, Pablo Kósiner, hoy está a cargo del armado provincial del frente que ya anunciaron el gobernador de Córdoba, Juan Shiaretti, y el otrora mandamás salteño, que aún mantiene su sueño intacto de llegar a la Casa Rosada.

En diálogo con Salta/12 el dirigente aclaró que no integra el nuevo frente provincial Avancemos que presentaron los diputados nacionales Carlos Zapata (Ahora Patria) y Emiliano Estrada (Frente de Todos) junto al partido Salta Independiente de los hermanos Biella.

Fiel a su estilo “antigrieta” para sumar porotos de desencantados de cualquier bando, el sector que encabeza el ex gobernador por ahora se declara prescindente en las elecciones provinciales, abocándose solo a las nacionales.

No hemos tomado posición respecto a la conformación de algún frente en la provincia, en su momento se verá si se toma alguna definición”, sostuvo el ex diputado nacional. “Somos conscientes que al estar desdoblada la elección, muy posiblemente pueda adherir a este espacio nacional gente que en la provincial jugó en distintos espacios, entonces queremos ser prudentes”, se sinceró.

Como con los aliados que consiguieron en provincias como Santa Fe, con quienes tienen acuerdos con el peronismo y el socialismo; en San Luis con los Rodriguez Sáa, y en Buenos Aires, con el lavagnismo, les resta hacer lo propio en Salta con los dos sectores que hoy se muestran por fuera de los dos frentes nacionales, el saencismo y Avancemos.

“Las distintas fuerzas que se están armando son muy transversales, entonces vamos muy despacio en ese sentido, buscando mayor volumen nacional para después ir bajando en la construcción en cada provincia”, agregó Kósiner echando luz a la estrategia electoral, no jugarse por nadie para dialogar con todos después del 14 de mayo. “Los tiempos nuestros son diferentes a los que tienen quienes juegan en la provincia”, aclaró.

En ese marco aprovechó para recordar que “las puertas están abiertas para todas las expresiones provinciales”, y no descartó poder llegar a algún acuerdo con Gustavo Sáenz, “será cuestión de cada gobernador y dirigente tomar esa posición cuando entienda que lo puede hacer”.

Sobre Avancemos, opinó que siempre le parecen válidas las coaliciones políticas para confrontar elecciones en la medida en que existan coincidencias en un programa de gobierno, “porque a la Argentina le hicieron mal los frentes electorales para que no gane cuál o no gane tal”. Algo que según el ex funcionario, se ve hoy en el espacio al frente del Ejecutivo nacional “en donde escuchamos a Máximo Kirchner criticar el acuerdo con el Fondo Monetario impulsado por su propio gobierno”.

Límites laxos

Cuando Salta/12 le preguntó sobre los límites político ideológicos que tendrá esa coalición compuesta por gobernadores peronistas que aún coquetean con el Frente de Todos, dirigentes que ya se alejaron hace tiempo, un sector del GEN de Margarita Stolbizer y hasta el socialismo santafesino, Kósiner contestó que dependerá “de la posición que los distintos dirigentes tomen en cuanto a las construcciones nacionales”.

Y volvió a lo que hasta aquí es la única definición de este sector, romper con “la grieta” que supuestamente divide a los argentinos personificada en el progresismo del Frente de Todos y la derecha de Juntos por el Cambio: “claramente la Argentina necesita una instancia superadora a la grieta que hoy está inmovilizándola”.

“Si volvemos a repetir esquemas que han fracasado en sus gestiones, el destino del país será el mismo”, añadió.

En esa lista sumó a Libertad Avanza de Javier Milei, a quien calificó como “un emergente del descontento de la gente respecto a la gestión política, pero de ninguna manera es la salida para la Argentina”.

El referente urutbeycista elevó la apuesta y aseguró que el modelo de país que representa el economista ultraliberal, “no existe en ningún lugar del mundo”, “sin Estado, sin Banco Central o Tesoro Federal, es imposible gobernar y hacer funcionar un país”.

La apuesta al diálogo

Fiel a la imagen dialoguista que construyen Schiaretti y Urtubey, Pablo Kósiner expresó que una de las principales dificultades para gobernar y gestionar hoy tiene que ver con los acuerdos parlamentarios, debido a que ninguno posee, ni puede aspirar a ello, una mayoría automática, y que ni desde el FdT ni desde JxC se podrá llegar a generar consensos entre oficialismo y oposición, algo que sí podrían garantizar ellos.

El presidente que venga va a tener una oposición mayoritaria en el Congreso, y si el que llegue está inhabilitado para dialogar con la oposición, vamos nuevamente a un fracaso, por eso sostenemos que la construcción política tiene que ser amplia”, describió.

El PJ provincial

Una de las secuelas que quedaron entre el espacio que representa Kósiner y la coalición gobernante en Salta, tuvo que ver con el episodio que vivieron dentro del Partido Justicialista, que culminó con el alejamiento del referente urtubeycista.

Al respecto, Pablo Kósiner repitió que aún sostiene esa decisión porque no está de acuerdo con que las nominaciones de las candidaturas locales “sean a dedo”. “No es una elección democrática, no lo fue hace dos años y tampoco lo va a ser ahora”, indicó, y recordó que esa decisión le costó al Partido Justicialista “no poner ningún diputado ni concejal en la capital” en las elecciones de medio término de 2021.

Para el dirigente, al eliminarse las Primarias Abiertas “debería haber al menos una interna para elegir candidatos”. Y aseveró que en ese sentido, el sistema político de Salta “ha retrocedido claramente a un estado casi predemocrático”. Aunque aclaró que sigue siendo afiliado al PJ y que solo se apartó de la orgánica y la dirigencia.