EE.UU. está buscando en un área marítima equivalente a quince por quince campos de fútbol, los restos del globo espía de China que destruyeron el sábado sobre el Atlántico, dijo este lunes el jefe del Comando de Defensa Aeroespacial de Norteamérica, el general Glen VanHerck.
De la búsqueda participan
el barco de la Armada USS Carter Hall, una embarcación Pathfinder con un sonar
y vehículos submarinos no tripulados que indagan 15 metros bajo las aguas. No se
descartó que partes del globo lleguen a la orilla y se instó a los ciudadanos
que vivan en la zona a avisar si se encuentran con alguna pieza.
Las fuerzas armadas están recibiendo ayuda del
FBI y del Servicio Naval de Investigación Criminal. Según VanHerck, el globo medía 61 metros de alto
y tenía un espacio de carga similar al de un avión, por lo que calculó que los
restos del aparato pueden tener un gran peso. Tenía paneles solares y
material "potencialmente peligroso", como un equipo de baterías y posibles "explosivos" para detonar y destruir el globo.
El comandante del NORAD confirmó que el globo fue destruido el sábado por el
disparo de un misil AIM-9X con una ojiva nuclear desde un cazabombardero F-22.
El portavoz del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca, John Kirby, defendió este lunes la actuación de EE.UU. al derribar el globo espía chino que estuvo varios días sobrevolando el territorio nacional y aseguró que "EE.UU. actuó de conformidad con el derecho internacional y en defensa de nuestra patria y de nuestro espacio aéreo soberano", dos días después de que EE.UU. derribara el globo frente a las costas de Carolina del Sur.