Algo más de una hora duró la primera reunión del ministro de Educación Jaime Perczyk con los cinco gremios con representación nacional donde se comenzó a debatir la paritaria docente. Por ahora se decidió pasar a un cuarto intermedio para la semana próxima. Entre otras demandas, los docentes solicitaron un aumento por encima de la inflación y revisiones periódicas, una elevación del presupuesto para el sector y avanzar en el convenio colectivo. En tanto, los gremios de la educación porteños también se reunieron con las autoridades de CABA. Los sindicatos se manifestaron en contra de la intención de JxC de fijar un techo a las paritarias del 60 por ciento.
En este primer encuentro, la agenda planteada por los gremios consistió en un incremento que supere a la inflación y revisiones permanentes que permitan corregir lo pactado, en línea con lo que se acordó en 2022. También solicitaron la modificación del Impuesto a las Ganancias en el marco de la campaña "El salario no es Ganancia" y reclamaron una nueva Ley de Financiamiento Educativo que eleve el presupuesto del 6 al 8 % del PBI. De la mesa participaron la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera), el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop), la Unión de Docentes Argentinos (UDA), la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (Amet) y la Confederación de Educadores Argentinos (CEA).
La mesa de CABA
En tanto, los gremios porteños de la educación realizaron también su primer encuentro con los representantes del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta. La reunion finalizó sin una propuesta concreta del Gobierno porteño.
"El Gobierno de Larreta no hizo ninguna propuesta de números, pero deslizó que iba a rondar el 60 por ciento", dijo a Página/12 la secretaria general de Ademys, Mariana Scayola, quien adelantó que de concretarse no la aceptarán. Desde este sindicato, en cambio, exigieron un aumento del 100 por ciento y un salario acorde a la canasta familiar estipulada por los trabajadores de ATE del Indec en 250 mil pesos. También manifestaron que el salario del sector "está por debajo de la línea de pobreza" y en ese sentido propusieron "eliminar la naturalización del pluriempleo en la docencia, del doble o triple cargo".
Por su parte, los representantes de la UTE propusieron que "el aumento salarial sea desde el mes de febrero, que supere la inflación, que se tome como base para el aumento del segundo semestre el salario del mes de junio, se incorpore una cláusula de revisión y reapertura de la mesa, la necesidad de un nuevo boleto educativo frente al incremento en el transporte público para docentes y estudiantes, y creación de nuevos cargos docentes y escuelas", según expresaron en un comunicado.
Desde Ademys, sin embargo, advirtieron que el inicio del ciclo lectivo, pautado por el ministerio de Educación porteño para el 27 de febrero, podría peligrar en caso de que las negociaciones se dilaten. El sindicato puso fecha para una asamblea abierta donde se decidirá la aceptación o el rechazo de la pauta salarial. Será el 22 de este mes. "Allí se definirá, avanzada incluso la negociación y con la propuesta del Gobierno, si hay o no medidas de fuerza de cara al inicio del ciclo lectivo", aseguró Scayola.
