La apertura del local de venta de aceite de cannabis había despertado entusiasmo y curiosidad en los usuarios terapéuticos, autorizados a ingerir la sustancia por una ley aprobada recientemente por el Congreso Nacional. Sin embargo, las autoridades municipales, del ministerio de Salud provincial y del Colegio de Farmacéuticos local contraatacaron para impedir el funcionamiento del comercio.
El local de Daniel Landgreen, militante del uso de cannabis medicinal, solo duró un día. Durante la madrugada de hoy, la Fuerza Policial Antinarcotráfico cordobesa allanó y clausuró el local de la galería Argenta, con un despliegue inusitado, que incluyó corte de calles, armas largas y pasamontañas.
La Policía local informó que "se secuestraron varios bidones y frascos conteniendo aceite de cannabis, 1653 gramos de cogollos, hojas de marihuana y 157.603 pesos".
Landgreen fue imputado por el fiscal Pedro Caballero a raíz de la denuncia por "ejercicio ilegal de la profesión” que presentó el Colegio de Farmaceúticos de Córdoba. El abogado del comerciante, Carlos “Chuzo” González Quintana, confirmó a Página/12 que hubo otra imputación por una denuncia del Ministerio de Salud de la Provincia, que considera que Landgreen estaba cometiendo un delito contra la salud pública. En tanto, el Fuero de Lucha contra el Narcotráfico analiza los presuntos delitos de venta de drogas y la venta ilegal de sustancias medicinales. “Todavía no hay imputación por violación a la ley de drogas, porque nada de lo secuestrado puede ser considerado droga, ya que solo secuestraron aceites de cannabis”, aclaró González Quintana.
Landgreen, quien dirige la Comunidad Cannábica Córdoba y estuvo detenido 40 días en la cárcel de Bouwer, hace un año y medio, acusado de "tenencia de semillas para producir estupefacientes", promocionó la apertura del primer local de venta de cannabis presentándose como productor de aceite cannábico mientras reclama la sanción de un marco legal que permita abastecer de aceite a miles de pacientes de aproximadamente 45 patologías diferentes.
“La policía antinarcótico montó un show. Cortaron la calle, andaban con armas largas. Ellos no diferencian entre un allanamiento a una cocina de cocaína con esto”, denunció González Quintana. “Nosotros esperábamos una reacción porque se están tocando intereses multimillonarios, que consideran la medicina como mercancía. Sabemos a qué nos enfrentamos”, añadió.
El abogado subrayó que en la Argentina hoy hay un “grave conflicto de leyes” en torno a la marihuana. La ley 23.737 persigue delitos contra la salud pública, castigando a quien siembra, cultiva o guarda semillas de cannabis para su producción, con 4 a 15 años de cárcel. Paralelamente, la Ley de Cannabis Medicinal, recientemente sancionada, autoriza el uso medicinal de la marihuana por sus comprobados efectos positivos para la salud. “Una ley dice que la marihuana es nociva y otra que es beneficiosa”, advirtió.