FANAZUL es una de las cinco plantas que Fabricaciones Militares posee en el país y la única ubicada en la provincia de Buenos Aires. Ubicada en el kilómetro 9 de la Ruta Provincial N° 80, en la localidad de Azul, padeció su cierre el 28 de diciembre de 2017 y su posterior desmantelamiento, así como vencimientos de licencias de producción. Focalizada en la fabricación de explosivos y pólvora, la sede fue visitada por el ministro de Trabajo de la provincia, Walter Correa, quien instó a los trabajadores a “sentirse acompañados a pleno por el gobierno provincial en este proceso de reapertura”.
El titular de la cartera laboral provincial recordó frente a los obreros presentes, que siendo secretario de la Comisión de Defensa de los trabajadores y trabajadoras de la Cámara de Diputados de la Nación durante el macrismo se ocupó del conflicto alrededor de Fabricaciones Militares. “Vivo esta reactivación como una especie de revancha”, señaló Correa, y remarcó que “estuvimos en una instancia de pelea y hoy vivimos esta etapa de consolidación, sobre todo en un sector estratégico como es el de la defensa nacional”.
Luego de su clausura definitiva el 1 de febrero de 2018, la decisión del ex presidente Mauricio Macri dejó sin trabajo a 200 empleados y empleadas de la planta. Hubo varios reclamos al respecto. Durante una visita del ex mandatario junto a la ex gobernadora María Eugenia Vidal en julio de 2019, la esposa de uno de los obreros despedidos insultó a Macri adjudicándole la responsabilidad de la pérdida del puesto de trabajo de su marido. La policía detuvo a la manifestante.
En aquel año, también se expresó Elisa Carrió. La co-fundadora de Cambiemos y hoy, según lo expresó ella misma recientemente, precandidata presidenta de la Nación, aseguró que “fabricaciones militares era el grupo donde La Cámpora se armaba”. No conforme con esa afirmación, ‘Lilita’ agregó que se “vendía pólvora, se vendían armas, junto con el RENAR, y muchísimas de esas armas están en Brasil y en la Triple Frontera”.
Las acusaciones formuladas por la líder de la Coalición Cívica fueron desmentidas en su momento por los propios trabajadores de la planta que, incluso, aclararon que “la fábrica no realizaba armas y desde el año 1991 no se hacía más pólvora, es decir que lo que dijo es mentira”. En aquello días, los fabriqueros vivieron una “estigmatización” de parte del gobierno. El ex ministro de Trabajo de la PBA y autor de la analogía de la ‘Gestapo’ sindical, Marcelo Villegas, también hizo eco de las declaraciones de Carrió de aquel entonces y agregó que había que “evaluar si la gente que había sido contratada durante los últimos años del gobierno anterior prestaba tareas o no, si había militancia o no".
La actualidad es diferente. Correa destacó la “satisfacción” que le produjo recorrer la fábrica “con un colectivo de compañeras y compañeros comprometidos con la soberanía nacional”. Frente a los obreros, el ministro señaló la importancia del proceso de reapertura, la recuperación de una fuente de trabajo, y la labor estratégica de la empresa. “Les voy a pedir algo, como un trabajador industrial más: sigan peleando, sigan luchando, porque hay un montón de familias que esperan que hagan las cosas bien”, apuntó.
La visita conjunta de Walter Correa y el vicepresidente de Fabricaciones Militares, Oscar Galante, significó la supervisión de dos proyectos prioritarios con los que se reactivará la Fábrica Militar de Explosivos de Azul. Uno es la Planta de Destrucción de Chalecos Antibala, dado que este es un material regulado por la ANMAC y su descarte tiene que ser homologado. Por otro lado, se está llevando a cabo la reactivación de la Planta de Nitroglicerina y Master Mix para la producción de explosivos para minería. Ambos funcionarios también recorrieron la planta de ácido, el laboratorio, y la torre de denitración.
Galante celebró que “esto es la soberanía de la Patria”. “No solamente reivindicamos Malvinas, sino que defendemos soberanía y producción”, agregó el funcionario de Fabricaciones Militares quien recordó que desde FANAZUL se enviaban los misiles Exocet cargados para Malvinas. “No puedo dejar de imaginar lo que debe ser para los y las compañeras la reactivación de este lugar tan emblemático”, apuntó.
Durante la actividad, el ministro Correa estuvo acompañado por la jefa de Gabinete de la cartera laboral, Cecilia Cecchini, el director Provincial de Delegaciones Regionales de Trabajo y Empleo, Miguel Funes, el secretario ejecutivo del Instituto Provincial de Formación Laboral (IPFL), Ezequiel Berrueco, el Coordinador Zona VIII del Ministerio, Miguel Calamante, y la delegada regional Mariela Barrera.
Plenario sindical y puesta en funcionamiento de un Centro de Formación Laboral
La actividad del ministro de Trabajo provincial en Azul continuó con la firma del protocolo de funcionamiento del Centro de Formación Laboral (CFL) N° 402, el cual será gestionado por la seccional local de la UOCRA. Allí, Correa encabezó un plenario con representantes gremiales de la región, tanto del sector público como privado. “Acá no vinieron superhéroes, los que pusieron el cuero, el pecho y la sangre fueron muchos compañeros y compañeras que dieron su vida en la defensa de nuestro pueblo”, destacó el ministro en alusión al rol de las organizaciones de los trabajadores durante la pandemia.
“Parte de lo que nos pide el gobernador Axel Kicillof es esto que venimos haciendo de ir al territorio, de interactuar con las y los compañeros”, expresó ante las y los obreros presentes en la sede local de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina. El titular de la cartera laboral de la PBA trasladó el agradecimiento del gobernador porque “en los dos años de pandemia que sufrimos los movimientos sindicales fueron los que pusieron todo a favor de la salud de su pueblo aportando clínicas, ambulancias, médicos e infraestructura”.
Respecto al nuevo CFL, Correa definió que hoy, bajo su gestión, se está “invirtiendo la lógica” acerca de la manera de trabajar que existía sobre la formación y la capacitación de los Centros. “Desde La Plata no vamos a configurar los programas, sino que los mismos van a estar establecidos conforme a los criterios de las y los trabajadores en el territorio”, sintetizó. La rúbrica estuvo a cargo del titular del IPFL, Ezequiel Berrueco, organismo de aplicación por el ministerio de Trabajo, y la Fundación UOCRA.
En diálogo con Buenos Aires/12, Berrueco destacó que con este nuevo espacio se podrá "profundizar la labor en materia de formación y capacitación para la comunidad de Azul y
su región educativa" a través de congeniar "con el movimiento obrero la ampliación de proyectos formativos orientados a las características productivas de la región". "Como Instituto es clave la actividad de ayer porque en la séptima sección nos permite
aportar a la territorialidad de ministerio de Trabajo", remarcó.
En relación a la recorrida por FANAZUL, el titular del IPFL aseguró que "la recuperación de la planta estratégica en materia de soberanía para la provincia que atiende un tema estratégico y es una respuesta a la política de despidos y perdida de soberanía de Macri y Vidal". En esta sintonía, Berrueco recordó que en la planta de Fabricaciones Militares "hubo más de 200 despidos injustificados que tienen que ver con un modelo de Estado que desprecia la Soberania Nacional y que afectó a la comunidad de Azul porque cientos de familias dependían de estos empleos".