Un hombre mató a tiros a tres personas e hirió a cinco dentro de la Universidad de Michigan (MSU) antes de suicidarse, en un nuevo tiroteo masivo en Estados Unidos. Los tres muertos y los otros cinco heridos eran estudiantes, mientras que el agresor, un hombre de 43 años, no tenía relación con ese centro educativo, informaron este martes las autoridades locales.
El subjefe interino de la Policía de esa universidad, Chris Rozman, señaló este martes en una conferencia de prensa que las dos primeras víctimas mortales fallecieron en un primer tiroteo en Berkey Hall, un edificio académico, mientras que la tercera murió en M.S.U. Union, un lugar donde los estudiantes suelen reunirse para comer o estudiar.
El agresor, que falleció por una herida de bala "autoinfligida", tal y como ya se había informado el lunes por la noche, fue identificado como Anthony McRae. Se desconoce por el momento la motivación de su ataque. En una imagen capturada por las cámaras de seguridad de la universidad se lo veía con campera, gorra vaquera y zapatillas deportivas rojas.
El tiroteo comenzó poco después de las 20.30 hora local (01.30 hora GMT del martes). Las autoridades recibieron una llamada desde Berkey Hall y para cuando llegaron, minutos después, según Rozman, hallaron dos personas muertas y varias heridas.
La alerta se levantó de madrugada. La Universidad de Míchigan publicó en su web a las 01.05 hora local que el sospechoso había sido localizado muerto.
El presidente interino del Hospital Sparrow, Denny Martin, apuntó este martes ante los medios que las cinco personas heridas siguen en estado crítico.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, informó en un comunicado que ordenó "el despliegue de todas las fuerzas de seguridad federales necesarias para apoyar los esfuerzos de respuesta locales y estatales" y se comprometió a proporcionar los recursos necesarios durante las próximas semanas.
Asimismo, Biden hizo un llamamiento al Congreso de EE.UU. a actuar y "promulgar reformas de sentido común" para limitar el comercio de armas, que incluyan la exigencia de la comprobación de antecedentes de los compradores, así como la prohibición de las armas de asalto, entre otras.
La gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, fue informada sobre el tiroteo y dijo que la policía estaba trabajando para asegurar la zona. "Abracémonos esta noche con la comunidad espartana", escribió Whitmer en Twitter, en una referencia al logo atlético de la universidad.
Los tiroteos en escuelas y universidades son alarmantemente frecuentes como parte de una ola más amplia de violencia armada en Estados Unidos, donde la proliferación de armas de fuego ha crecido en los últimos años.
La universidad de Michigan es una de las más grandes de Estados Unidos, con más de 50.000 estudiantes. Ese centro suspendió todas sus actividades durante 48 horas, incluidas las clases virtuales, ha pedido a sus alumnos que no se acerquen al campus y se puso a disposición de quienes necesiten ayuda psicológica.