Este martes militares israelíes mataron a un palestino de 17 años en la ciudad cisjordana de Ramalá. Se trataba de Mahmoud Majed Mohammad al-Ayedi, asesinado durante una incursión de Israel en el campo de refugiados Far’a. El mismo día murió Haroun Abu Aram de 25 años, quien hace dos años forcejeó desarmado con soldados israelíes que le estaban robando un generador eléctrico y le pegaron un tiro en el cuello.


El hecho sucedió en Masafer Yatta, área de Hebrón donde un millar de palestinos están bajo amenaza de ser desplazados de sus tierras. El joven había quedado cuadripléjico y murió por una infección pulmonar. El caso generó revuelo internacional porque fue filmado. Un mes antes Israel le había demolido la casa a su familia.