El juez penal Nicolás Foppiani resolvió ayer que queden detenidas las cuatro personas demoradas por el robo del arma del policía Ricardo Medini, ocurrida tras la balacera del cantobar de Juan B. Justo 8400.
El fiscal de Homicidios Alejandro Ferlazzo imputó a Maximiliano Ezequiel Algañaraz, a Sebastián David Hermosin y a Brian Leonel Monzón por el delito de hurto agravado en concurso real con el delito de portación ilegal de arma de fuego de uso civil.
El trío estaba dentro del boliche la madrugada del domingo último cuando a las 5.50 una lluvia de plomo se descargó sobre el frente del local, y terminó con la vida del efectivo y de un custodio e hirió a otras tres personas.
Los tres aprovecharon el hecho sangriento para robarle el arma reglamentaria a Medini, que yacía moribundo en el piso, así como su billetera con documentación personal. Horas después los tres hombres fueron denunciados por disparar un arma en un descampado cercano y posteriormente detenidos. La pesquisa encabezada por la Agencia de Control Policial logró dar con el correr de las horas con una vivienda donde estaba escondida el arma de Medini, y detuvieron a su propietaria.
Se trata de Marina Soledad Fernández en cuya vivienda de Schweitzer 8365 fue secuestrada la pistola oficial Bersa de Medinia, además de otra arma de fuego. También fue incautado material estupefaciente en el mismo domicilio, unos 400 gramos de cocaína además de marihuana. El juez Foppiani dictó la prisión preventiva efectiva sin plazo para Hermosin y de 60 días para Algañaraz y Monzón. Para Fernández dictó la prisión preventiva efectiva sin plazo.