Con placas rojas y cuatro ejes de campaña expuestos a través de un hilo de Twitter, Diego Santilli apuró la oficialización de su candidatura a la gobernación de la Provincia de Buenos Aires el pasado miércoles. El cambio de marcha del diputado nacional del PRO responde a la necesidad de fortalecer su posicionamiento de cara a la interna de la alianza opositora, que todavía no resuelve el mecanismo con el que terminará designando sus representantes para la elección de octubre.
"Sí, Falta Menos para empezar a resolver los problemas que te complican la vida todos los días. Por eso quiero ser Gobernador de la Provincia de Buenos Aires. Voy a seguir trabajando para que puedas vivir mejor de una vez por todas. Falta menos y te pido que me acompañes", publicó el ex vicejefe de Gobierno porteño que concentró su propuesta en cinco ejes principales: la seguridad, el trabajo, la producción, la educación y la pelea contra el sindicalismo, a la que decidió nombrar como "las mafias que bloquean tu empresa". También hubo palabras contra la toma de tierras, los narcos, la salud y la desactivación de algunos ministerios.
En líneas generales, los temas planteados por el diputado no se alejaron demasiado del discurso que el PRO expone a nivel nacional y en cada uno de los territorios en los que se propone competir. El posteo recibió el saludo de la mayor parte del larretismo, que se replicó en numerosos retweets desde el gabinete porteño que comanda su amigo y jefe político, Horacio Rodríguez Larreta. Algo que no sucedió con sus compañeros de partido y coalición que comparten las mismas ansias de protagonismo con "el Colo", pero no se sintieron aludidos por el lanzamiento.
Ni Crisitian Ritondo, ni Javier Iguacel, ni Joaquin De la Torre, ni Emilio Monzó piensan en modificar sus agendas por la oficialización de las aspiraciones de Santilli. Ya las conocían, y la reconocen como válida desde el momento mismo en que el diputado dejó su anclaje politico en la Ciudad de Buenos Aires para migrar a la provincia durante la elección legislativa del 2021. A partir de allí, empezó a recorrer el territorio bonaerense y, según su equipo, ya logró desandar 105 mil kilómetros, que extenderá en la nueva fase de su campaña. Las placas rojas tampoco alteraron demasiado los planes de Maximiliano Abad, Martín Tetaz y Gustavo Posse, los tres radicales anotados en la misma carrera.
Sin embargo, en su afán de ampliar los apoyos a su candidatura y acrecentar las chances de victoria de la colaición opositra, Santilli lanzó el anzuelo para seducir a la parte más dura del escenario provincial. Con un Javier Milei que ya negó de raíz la posibilidad de avanzar en un acuerdo que lo sume a Juntos por el Cambio, el diputado amarillo puso el ojo en José Luis Espert.
Santilli afirmó que "tiene puntos de concordancia con algunos liberales", como el diputado de Avanza Libertad, aunque también se esmeró en marcar las distancias. "Me gusta el Espert economista, cuándo dice 'bala todo el tiempo' me da un poco fuerte, pero la gente en la calle tiene miedo, no puede estar a las 4 de la madrugada esperando el colectivo", aseguró, a la vez que advirtió que actualmente "no hay un diálogo" destinado a avanzar en un acuerdo.
La semana que viene, la mesa de dirigentes provinciales del PRO volverá a reunirse en La Plata. A comienzos de mes y con la presencia de los principales referentes territoriales de la provincia, el PRO bonaerense tuvo su cumbre en medio de la puja interna que no logra definir una estrategia para consensuar el nombre que represente al partido en la interna de Juntos por el Cambio de cara a la disputa por la gobernación que tendrá su primer capítulo en las primarias del mes de agosto. Del encuentro no salieron definiciones mayores respecto a las candidaturas, pero si se reafirmó la necesidad de avanzar sin poner en riesgo la unidad.
Con esa idea, se consensuaron críticas y lineamientos de campaña, y también se ratificaron las candidaturas de todos los aspirantes del espacio. Allí se habló sobre la necesidad de conservar los gobiernos municipales que hoy comanda el PRO y se deslizó la posibilidad de seguir analizando las chances de habilitar primarias en algunos distritos y de apostar por las fórmulas cruzadas con el radicalismo en una eventual interna provincial.
La fecha para continuar con ese debate será el próximo jueves 23, el mismo día en el que el Foro de Intendentes Radicales celebrará su primera reunión del año, unos 270 kilometros más al sur, en Rauch.
Con una tradicional agenda de gestión, los jefes y jefas comunales boinablanca se encontrarán para discutir temas que tiene su central preocupación en el tema económico y la coparticipación. Sin embargo la discusión sobre las realidades locales que seguramente traerá aparejado una serie de reclamos a la provincia respecto a la distribución de fondos y programas no quedará exento de la realidad política.
Así las coas, del mismo modo en que el oficialismo provincial avanza en reuniones estratégicas respecto a la mejor forma de encarar el proceso electoral en cada uno de los distritos, la UCR buscará empezar a analizar la manera para sostenerse en los distritos que gobierna. Casi en el mismo plano, no son pocos los referentes locales del radicalismo que empiezan a conversar respecto a la representatividad expresada desde el legislativo provincial.
En ese contexto, la intención de algunos intendentes es empezar a discutir las listas legislativas del espacio. Ese planteo, alejado de la realidad inmediata por razones estrictamente calendarias, va de la mano con la discusión en torno a la aspiración mayor del radicalismo provincial: quedarse con el casillero principal de la boleta con la que Juntos por el Cambio buscará vencer al peronismo en el distrito más grande del país.