El Día del Gato se festeja cada 20 de febrero. En esa fecha, millones de personas en todo el mundo expresan su cariño a los felinos. Aunque el día dedicado a estas mascotas tiene tres fechas, la celebración de este martes es la más aceptada. Las otras dos son el 8 de agosto y el 23 de octubre.
¿Por qué se celebra el Día del Gato?
El Día Internacional del Gato se celebra cada 20 de febrero desde 2009 y tiene su origen en Socks, uno de los felinos más influyentes y recordados. El gato vivía en la Casa Blanca y era del expresidente de los Estados Unidos Bill Clinton. En rigor, de su hija, Chelsea.
Socks habitó la casa de gobierno norteamericano desde 1993 y se hizo conocido por aparecer de forma espontánea en múltiples actos oficiales y ruedas de prensa del entonces mandatario. El felino presidencial tuvo una gran popularidad entre los estadounidenses, incluso visitó escuelas y hospitales y llegó a tener un club de fans.
En junio de 2008, Socks comenzó a manifestar problemas de salud, con pérdida de peso y cabello y complicaciones renales. A fines de ese año, se le diagnosticó cáncer y el 20 de febrero de 2009 le practicaron una eutanasia. Así, el Fondo Internacional para el Bienestar de los Animales (IFAW) propuso esa fecha como el Día Internacional del Gato.
La conmemoración también ocurre el 8 de agosto, ya que ese mes es en el que los gatos son más propensos a entrar en celo en el hemisferio norte, y por ende, el momento de mayor reproductividad. En el caso del 23 de octubre, su origen se debe a una mujer estadounidense, Collen Paige, que quiso crear conciencia en las personas sobre los problemas que viven los gatos en situación de calle y abandono.
10 consejos para cuidar mejor a los gatos
Para celebrar el Día Internacional del Gato, estos son 10 consejos para cuidar a los gatos.
- Dividir el hogar en tres grandes zonas
“El mejor consejo para cuidar a nuestros gatos es dividir el hogar en tres grandes zonas”, indicó el médico veterinario Juan Enrique Romero, quien enumeró la necesidad de brindar las mascotas una zona de descanso, otra de eliminación y una restante de alimentación.
Sobre la zona de descanso, precisó que es la que el animal utilizará para su ocio, para todo lo que tenga que ver con sus juegos y donde va a tener sus rascadores, por ejemplo.
En referencia a la zona de eliminación, indicó que “los gatos deben tener al menos dos bandejas sanitarias, para poder elegir cuál prefiere”. Por último, sobre la zona de alimentación, aconsejó separar el agua de los alimentos y señaló también que es usual ver a los gatos tomando agua de la canilla porque la prefieren fresca y cristalina.
2. Colocar la protección necesaria en el hogar
Por sus características, a los gatos les gusta la libertad, trepar, saltar árboles, caminar por las cornisas de una casa y hasta descansar en la baranda de un balcón, indicó el doctor en Ciencias Veterinarias Roberto Gerosa. Si bien cuentan con una agilidad particular, a veces estas conductas pueden llevarlos a situaciones riesgosas.
En este sentido, el especialista indicó que si se vive en una casa o departamento que cuente con balcón, es recomendable colocar estructuras de protección, como por ejemplo un alambrado, para evitar que el gato se lastime.
3. Querer al gato y mantener una relación de respeto
Gerosa destacó que los animales tienen una parte del cerebro donde generan todas sus emociones, las cuales son similares al del ser humano. Para desarrollar en el gato sentimientos de amor y confianza, es importante demostrarle cariño con diferentes acciones, como por ejemplo compartiendo parte de lo propio, dándole un lugar para que duerma, dándole su comida y cuidándolo ante una dolencia.
Por su parte, Romero agregó que si existe una palabra para definir la relación entre un gato y su tutor, esta palabra es respeto. En este sentido, sugirió hacer sentir parte del hogar al animal y ser cariñosos, pero siempre respetando sus espacios y límites.
4. Una alimentación saludable
Los especialistas recomendaron darle al gato siempre alimentos balanceados. Sin embargo, Gerosa aseguró que está permitido darle alguna otra comida, siempre en pequeñas cantidades y de vez en cuando, para darle un gusto al animal.
5. Cortar las uñas del animal si es necesario
Los gatos que viven en casas que cuentan con jardín o exteriores suelen ir desgastando sus uñas a medida que juegan, trepan árboles o están en contacto con piedras. Sin embargo, si un gato vive en un departamento, puede que sus uñas crezcan más de la cuenta. En este caso, para que no les moleste ni les genere ningún tipo de daño, el tutor puede decidir bajarlas un poco, agregó Gerosa.
6. Mantenerlos libres de parásitos
Si los gatos están en contacto con el exterior, pueden contraer parásitos como pulgas o piojos. Para poder cuidarlos y evitar que una picazón se transforme en ardor o dolor, se recomienda prestar atención a sus conductas. Por ejemplo, es hora de revisarlo si un gato está caminando y, de repente, se detiene a rascarse. Además, se sugiere su desparasitación al menos una vez al año.
7. Llevarlos al veterinario
Se debe llevar al gato al veterinario siempre que presente alguna dolencia. A su vez, cuando el gato es pequeño, también se lo debe llevar a este centro de salud para que el profesional correspondiente designe su esquema de vacunación.
8. ¿Qué hacer en verano y en invierno?
Romero precisó que, en verano, el tutor responsable del gato debe darle la posibilidad al animal de elegir el lugar que prefiera, que seguramente será el más fresco de la casa. En invierno, se repite el comportamiento, pero en búsqueda de calor.
9. Esterilización o castración de los gatos
Esterilizar o castrar a los gatos aumenta la posibilidad de que estos animales tengan una vida más larga y saludable, ya que disminuye el riesgo de contraer enfermedades, indicó en un informe Alejandra López, especialista en Bienestar Felino de Pawnia Pet Shop.
Los gatos sin esterilizar o castrar poseen alto riesgo de contraer el síndrome de inmunodeficiencia felina, enfermedad que se transmite a través de mordeduras.
10. Protección de cables y enchufes
Los felinos pueden tener mucha curiosidad y querer investigar su entorno en profundidad. Si bien esa característica puede llegar a ser adorable, también conlleva riesgos si en la casa existen cables o enchufes que si son mordidos o arañados representan un riesgo para las mascotas.
Un método para evitar accidentes es fijar los cables a una superficie lisa con cinta adhesiva. De esta manera los gatos tendrán más dificultades para romper con sus uñas el plástico externo del cable y exponerse a accidentes. Otra técnica para evitar que las mascotas se acerquen a lugares peligrosos para ellos es rociar las superficies con productos que les desagradan, como esencias cítricas o vinagre.
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Artículo publicado originalmente el 20 de febrero de 2023