Un tornado de tiburones. Bah, uno no: muchos. Tantos como para cinco películas. No una ni dos. Cinco. Sharknado 5: Global Swarming estrenará el domingo 6 de agosto a las 22 en el canal de cable Syfy. Y a esta altura se puede asegurar sin mucho riesgo que la saga merece el estatus de “de culto”. Para algunos –incluyendo sus responsables– es de esas películas que de tan malas se vuelven buenas. Y si dentro del elenco alguien sabe de participar de películas de culto, es Tara Reid, coprotagonista de esta saga junto a Ian Ziering y parte fundamental de ese otro hito generacional que fue American Pie.
“Fui muy afortunada”, le comenta Reid al NO en una teleconferencia, y deja trascender que le tomó un tiempo ser consciente del rol de esas películas para una generación de espectadores. “Hoy entiendo la importancia que genera en el público el desarrollo de estas películas y no me queda más que sentirme dichosa y agradecida por formar parte.”
La demencia encantadora de Sharknado está en no tomarse a sí misma demasiado en serio y buscar siempre superar el delirio que propuso la entrega anterior. Si en la 4 los tornados de tiburones se volvían más y más ridículos, cargándose de arena, piedras, lava, relámpagos y hasta energía nuclear, ahora dejan la costa estadounidense para irse de world tour. “En cada entrega se busca sorprender desde lo impensado”, reflexiona Reid ante la pregunta de un colega. “Los ataques de tiburones crecen en cada edición y los fans lo disfrutan. Sharknado es lo diferente, lo inusual, siempre con una propuesta que hace énfasis en el humor”, define.
Si las referencias y guiños fueron fundamentales para cimentar el éxito de las películas previas, en ésta destacan invitados como la actriz Porsha Williams, el skater Tony Hawk, la cantante Olivia Newton-John y su hija Chloe Lattanzi, la comediante Margaret Cho, medallistas olímpicos y una buena cantidad de otros que habrá que descubrir. “Es clave la cantidad de chistes que reúne: es una película para divertirse, muy lejos de la seriedad”, define y explica que la fórmula del equipo es divertirse ellos para luego divertir al resto. Y sacar al espectador de lo cotidiano: “Imaginar que hay un tiburón comiéndote en plena calle es muy gracioso”.
Aunque Reid está orgullosa de participar de todo esto, reconoce que al comienzo rechazó participar: “Pensé que era un chiste”. Es que vamos, ¿quién puede hablar en serio sobre un tornado de tiburones? “Después de evaluarlo, me di cuenta de que sería un error rechazarlo; por suerte acepté, ha sido una experiencia grandiosa.” Una experiencia que, además, se les fue de las manos. “Nunca imaginamos que esto crecería tanto, pensamos en una película y ya, y de repente nos encontramos con nuevas entregas y fans de todo el mundo que siempre quieren más.”