Hace algunos años el humorista y escritor Pedro Saborido inventó La Kermés 2037 un “coso de humor para evitar el corchazo del domingo a la tardecita”, ese momento particular de la semana en el que –según informan las estadísticas– se registra una alta tasa de suicidios. ¿Quién no sintió alguna vez esa extraña melancolía de domingo por la tarde? No se sabe muy bien de dónde proviene ese estado emocional –muchos han intentado descifrarlo– pero vale la pena buscar medicinas para contrarrestar ese mal que, al parecer, es de lo más humano.
Y como la melancolía no es patrimonio exclusivo de los domingos, en el verano del 2023 la propuesta cambió de día y se llevará a cabo una función especial este sábado a partir de las 19.30 en la sala Caras y Caretas 2037 para hacerle frente al tedio de febrero a pura carcajada. Las entradas pueden adquirirse a través de Alternativa Teatral.
“La idea de la kermés es que vos vayas a un lugar y encuentres algo que te divierta, y seguro te vas a divertir porque tiene muchas variables –asegura Saborido en diálogo con Página/12–. Hay varios números, magos, juegos. Es como meterse en un pequeño parque de diversiones donde podés jugar como si fueras un nene; simplemente hay que estar suelto. El espíritu de la kermés es que haya mucho y variado para que cada uno pueda encontrar lo que más le gusta probando cosas distintas. Hay un cruce de públicos, de artistas y distintos modos de abordar el humor o la música”.
El formato ideado por Saborido junto a Horacio David y Marcelo Melingo, directores artísticos de la sala, pone el énfasis en la diversidad de propuestas, la impronta colectiva y el encuentro de cuerpos presentes: una auténtica kermés. En 2019 –curiosamente poco antes de la pandemia– el guionista de Peter Capusotto y sus videos decía: “Se nos ocurrió que podíamos abrir un lugar para hacerle fuerza a lo comunitario y a la idea de encontrarse, y decidimos poner una variedad de cosas. Que haya muchas cosas y distintas, y que vayan rotando para que la gente sepa que puede volver. Son épocas en que hay muchas oportunidades para aislarse o estar conectados de una manera distinta a la más tradicional: estar al lado de una persona de verdad”.
Hoy aquella idea planteada en 2019 se resignifica. Después de una época de aislamiento y temor al contagio, se vuelve indispensable la creación de instancias que habiliten esos encuentros con les otres de manera relajada. De eso se trata La Kermés 2037: una suerte de circo de variedades con actividades y atracciones de todo tipo en la terraza (DJ MM, juegos, metegol, tejo, dardos, Paula Fukuhara, exhibición y desafíos de ping pong, La Gitana y la rueda de la Fortuna, Tomás Sarquis con magia de mesa, La Lola clown), y una ronda de números artísticos en formato breve a partir de las 21 en la sala de Sarmiento 2037, sin guión ni consigna y con el espíritu espontáneo que caracteriza al varieté. Además, a las 22.30 tendrá lugar una fiesta de verano en la terraza con más música, amigxs, bar y comidas.
En otras ediciones de La Kermés participaron artistas como Miss Bolivia, Rosario Bléfari, Julián Kartun, Osqui Guzmán, Leticia González de Lellis, Miguel Rep, Los Bla Bla, Los Sutottos, Femigangsta, Agustín Soler, Nico Gentile, Noelia Custodio, La Parker, Soy Rada, Fer Metilli, Damián Dreizik, Adrián Lacroix, Mosquito Sancineto, Chacovachi, Fanchulini y Hugo Varela, entre otros. El sábado será el turno del músico Martín Pavlovsky al piano con visuales a cargo de Tetsuo Lumiere, el payaso Tomate, Ximena Banús (La psicóloga), Manuel Fanego (Mika de Frankfurt), Un tal Juan Fernández (Sciervo) y el cierre musical a cargo de Sofía Viola.
El fenómeno kermés tiene una fuerte impronta popular. En relación a este punto, el autor dice que piensa este evento como “un acercamiento amigable, que tiende una mano”, y agrega: “A veces el humor o el juego funcionan como una introducción a un tema mucho más amable, receptiva e incluyente. Ahí lo popular no aparece como una carga cultural obligada desde lo ideológico sino desde la relajación, la hermandad y lo comunitario: el compartir. Cuando pienso en algo popular, inmediatamente pienso en algo que es compartible”.
El humor y la música son dos grandes ejes en esta propuesta que busca descontracturar los cuerpos de las tensiones acumuladas a lo largo de la semana. ¿Por qué en tiempos de tanta oferta desde las redes y las plataformas seguimos necesitando el encuentro con esas expresiones? Saborido reflexiona: “El humor y la música están en las redes porque son necesarias. Esto no es una definición. La gente necesita música, humor y constantemente va a buscarlo. En la televisión, por ejemplo, el humor aparece muchísimo. Quizás no hay demasiados programas de música, pero en la vida permanentemente vas buscando expresiones humorísticas para compartirlas con amigos. Lo mismo ocurre con la música. Son cosas que queremos tener siempre a mano para acompañar la vida, para soportarla mejor, para amortiguarla o simplemente para disfrutar”.
*La Kermés 2037 será este sábado a partir de las 19.30 en Sala Caras y Caretas (Sarmiento 2037).