La crisis venezolana llega a un punto de máxima tensión este fin de semana con la realización el domingo de la elección de una Asamblea Nacional Constituyente (ANC) convocada por el gobierno de Nicolás Maduro y rechazada por la oposición. El Ejecutivo anunció que desde mañana estarán prohibidas las manifestaciones que puedan "perturbar" el desarrollo del comicio, pero la opositora Mesa de la Unidad Democrática respondió con un llamado a movilizaciones en todo el país.
“Yo le propongo a la oposición que abandone el camino insurreccional, que vuelva a la Constitución e instalemos en las próximas horas, antes de la elección e instalación de la Asamblea Nacional Constituyente, una mesa de diálogo, acuerdo nacional y reconciliación de la patria, una mesa nacional de entendimiento para hablar de los grandes temas del país, para hablar de la paz”, dijo hoy Maduro al encabezar un masivo acto en el centro de Caracas. El mandatario advirtió que si no hay negociaciones, le entregará a la ANC “todo el poder de convocar de manera obligatoria un diálogo nacional de paz con una ley constitucional".
Maduro aprovechó el escenario montado ante la Avenida Bolívar para volver a rechazar las sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos contra funcionarios venezolanos. Criticó a "su majestad el emperador Donald Trump" y sumó críticas a los gobiernos de México y Colombia por haberse expresado contra la Constituyente. Se refirió al presidente colombiano como "su súbdito el vasallo Juan Manuel Santos" y dijo que el gobierno del mexicano Enrique Peña Nieto es “el Gobierno más entreguista y asesino que ha tenido México, haciendo reverencias al emperador Donald Trump".
"¿Qué hacemos? ¿A quién obedecemos? ¿Quién manda en Venezuela? Le digo al emperador Donald Trump: en Venezuela manda el pueblo de Venezuela", gritó el Presidente. "'Mister Trump, go home'", completó ante miles de militantes chavistas.
Mientras tanto, hoy la oposición cumplió con la segunda jornada de “paro cívico” contra el gobierno de Maduro. Nuevamente hubo bloqueos de calles con barricadas, especialmente en sectores del este de la capital venezolana, y el sector del transporte se sumó a la huelga, aunque el Metro de Caracas operó con normalidad. Ayer la protesta terminó con tres muertos, dos en la región andina de Mérida, uno en un barrio popular en el este caraqueño, según confirmó la Fiscalía General. Con ellos, la cifra de víctimas mortales desde que comenzaron las protestas opositoras en abril se eleva a 103.
La Mesa de la Unidad Democrática había convocado para mañana a la “Toma de Caracas”, pero el gobierno informó que se suspenderán todas las "manifestaciones públicas" que puedan "perturbar" el desarrollo de la elección a la ANC y advirtió que el incumplimiento de la norma acarreará sanciones penales. Ante ese anuncio, la MUD redobló la apuesta y convocó a una movilización en todo el país bajo la consigna “Toma de Venezuela”.
La oposición rechaza la constituyente convocada por Maduro y no participará del comicio. Hace dos semanas realizó un plebiscito no vinculante en el que, según informaron, más de 7 millones de votantes expresaron su posición contraria a la reforma constitucional.
Están habilitadas a votar más de 19 millones de personas, que el domingo tendrán la posibilidad de elegir 537 constituyentes: 173 miembros dentro de los grupos sectoriales (trabajadores, estudiantes, campesinos y pescadores, pensionados, personas con discapacidad y empresarios) y 364 territoriales: uno por municipio, dos por capitales de estado y siete por el Distrito Capital. Sin la presencia opositora, el nivel de participación electoral será el gran termómetro para medir el respaldo popular a Maduro y su proyecto de reforma constitucional.
Mientras tanto, el periodista argentino Jorge Lanata, su productora televisiva, Martina Perdiguero y el camarógrafo Carlos Torres, quienes habían viajado al país caribeño para cubrir las elecciones, fueron demorados en el aeropuerto internacional Simón Bolivar por no contar con la visa de trabajo correspondiente, y serán deportados esta misma tarde, situación que mereció la atención del canciller Jorge Faurie, quien a través de Twitter manifestó "Gran disgusto por el rechazo del ingreso a Venezuela de Jorge Lanata".
