Dos policías de Rosario, en actividad, fueron detenidos como resultado de una investigación originada en el crimen de un barrabrava de Newell’s Old Boys, y que dejó al descubierto una trama de presuntas complicidades entre delincuentes y personal de la fuerza de seguridad, en la que también están involucrados dos altos jefes, uno de ellos retirado, informaron fuentes judiciales.
Fiscales de la Agencia de Criminalidad Organizada de Rosario ordenaron seis allanamientos realizados en distintos puntos de la ciudad y de localidades cercanas.
Uno de los operativos se realizó en un galpón ubicado en la calle Guatemala al 2200 de Rosario, donde la investigación señalaba que se trataba de un punto de reunión entre delincuentes y policías. Allí personal de la Agencia de Control Policial (ACP) se encontró con una cena de la que participaban varias personas, entre ellas los jefes policiales.
Los agentes secuestraron más de una decena de teléfonos celulares; un millón y medio de pesos en efectivo envueltos en fajas del Banco Municipal de Rosario; un revólver calibre .38; una pistola calibre 9 milímetros y un valioso motor home, precisaron las fuentes.
Como resultado de los procedimientos fueron detenidos el subinspector David Luciano Arellano, que presta servicio en la División Judiciales, y el suboficial Mauro Barúa, que cumple funciones en la seccional 9ª de Rosario, detalló la ACP. Ambos estarían relacionados al homicidio de Nelson “Chivo” Saravia, un exjefe de la barrabrava de Newell’s Old Boys asesinado a balazos en su vivienda de San Nicolás al 3700 de Rosario en octubre de 2021, explicaron voceros del caso.
Si bien el rol que desempeñaron en ese caso aún no se conoce, el Ministerio Público de la Acusación (MPA) informó hoy que “en principio” serán acusados “por encubrimiento e incumplimiento de deberes de público”, el próximo lunes en el Centro de Justicia Penal.
Paralelamente, fue allanada la vivienda de un exjefe de Drogas Peligrosas de la Policía de Rosario, Alejandro Franganillo, ubicada en la localidad de Granadero Baigorria. Allí, la Policía secuestró una escopeta calibre .12/70, una pistola calibre 11.25, gran cantidad de municiones y cartuchos, dinero en efectivo, dólares y teléfonos celulares, detalló la ACP.
También fue allanadaq la vivienda del exjefe de la Policía de Rosario, Marcelo “Malevo” Mendoza, quien actualmente se desempeña en Villa Constitución. Franganillo y Mendoza, que estaban en el galpón allanado en Guatemala al 2200, serán imputados en libertad por tenencia ilegítima de arma de fuego. La misma suerte correrá el propietario del galpón.
La causa provincial que derivó en los allanamientos está entrecruzada con un expediente federal originalmente radicado en la localidad bonaerense de Campana, del que participa la Procuraduría contra el Narcotráfico (Procunar). Fuentes del caso indicaron que esa investigación se originó en una denuncia sobre una presunta trama ilícita que combina a policías en actividad y retirados con el delito narco.