Lisandro Aleman, poblador de Los Toldos, municipio del departamento Santa Victoria al que se ingresa por Bolivia, está desaparecido desde hace 8 días. Hay quienes cuestionan el accionar policial dado que la única persona que lo vio con vida por última vez nunca fue demorada o detenida, incluso fue parte del operativo de búsqueda, y falleció a los tres días de haber tomado contacto con el ahora desaparecido.
El domingo 26 de febrero en la mañana, Aleman salió a pescar al río Vallecito. “Es un río de montaña pero no es caudaloso”, explicaron a Salta/12 pobladores que pidieron mantener su identidad en reserva por miedo a represalias ante las críticas sobre el accionar de la Policía. Detallaron que la pesca es una actividad rutinaria de Aleman dado que lo hacía semanalmente.
Si bien fue con otro amigo (al que prefirieron no mencionar), los relatos aseguran que éste se volvió a las 17 y Lisandro le dijo que se iba a quedar un rato más. “El último que lo vio fue su primo, Modesto Aleman”, indicaron los pobladores, al recordar que eso fue lo que declaró el pariente a la policía.
Lisandro volvía siempre a la tarde o a la noche del mismo día que salía a pescar, pero ante su ausencia, su familia, que vive en el paraje El Arazay, ubicado a unos 5 kilómetros de Los Toldos, hizo la denuncia por desaparición de persona. La misma tarde del lunes salieron a buscarlo con la Policía.
El martes 28, cuando logran dar con Modesto, supieron que había visto a Lisandro el mismo 26 y “habían compartido unos tragos y que se había ido”.
En el pueblo empezó a rodar una sospecha sobre Modesto porque, según informaron los habitantes, “tenía algunos antecedentes” de violento o problemático.
“En lugar de detenerlo y preservar el lugar de los hechos, Modesto estuvo todo el martes y miércoles con el equipo de búsqueda”, indicaron quienes resaltaron la sospecha, al señalar que el equipo de búsqueda almorzó en la casa del sospechoso.
“Primero se encontró el celular de Lisandro, pero entendemos que no se lo preservó como debería haber sido (...) luego encuentran la caña de pescar, una gorra (...) la mochila más abajo, el morral, y más abajo las botas pero lamentablemente no encontraron al desaparecido”.
La muerte de Modesto
Frente a la falta de claridad en los hechos, familiares de Lisandro presionaron a Modesto para que diera más información sobre su primo, y Modesto decidió denunciarlos.
El jueves a media mañana lo encontraron fallecido, “Y con su muerte, se fue cualquier posibilidad de saber qué pasó con Lisandro”, dijeron los pobladores.
En cuanto al accionar de la Policía, afirmaron que la respuesta fue que la fiscalía a cargo de la causa no ordenó ninguna detención. Cuando “encuentran el cuerpo de Modesto se actúa rápido”. A la tarde del mismo día se determina que había sido un deceso por causas naturales. “Sospechamos que quizás se suicidó”, afirmó un lugareño.
Según la información policial, a la que este medio tuvo acceso, la muerte fue a causa de una pancreatitis aguda y desde el Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) se indicó que el deceso no tuvo que ver con agresiones físicas sino con el consumo de alcohol.
Rastrillajes con todo el pueblo
“Un día eran casi 70 personas las que se sumaron al rastrillaje”, contó una fuente toldeña al dar un panorama de la colaboración de los y las habitantes del paraje El Arazay y también en Los Toldos. Es que, según explicó, una situación como la acontecida es excepcional en este pueblo que colinda con el Parque Nacional Baritú, y alberga la reserva nacional El Nogalar.
Las fuentes policiales confirmaron que en la búsqueda, que al día de hoy cuenta con tres comisiones que tratan de dar con el paradero de Lisandro, son acompañadas por familiares y pobladores de la zona.
Los toldeños y toldeñas añadieron que la familia también decidió contratar el servicio de una empresa que hace rafting en el río Lipeo (que recorre la zona), para continuar la búsqueda. Y es que en el acceso al camino de zona montañosa (que solo puede ser transitado por quienes conocen el lugar), es necesario contar con vista aérea, con helicópteros o drones, que solicitaron pero hasta el momento no llegaron para ayudar en la búsqueda.