Al estilo de PepsiCo, la multinacional de snacks que cerró su planta de Florida y comunicó los 600 despidos con un cartel en la puerta, una empresa de insumos de liberaría ubicada en el partido bonaerense de San Martín eligió una modalidad similar para avisarle a sus empleados que se quedaban sin trabajo. “Bajen la persiana, nos quedamos sin plata”, fue lo único que les dijeron los dueños de Distripaper a los 70 trabajadores que ahora reclaman en la puerta de la empresa.
“Veníamos trabajando como siempre, armando pedidos y cargando las camionetas que salen para entregar la mercadería y el miércoles a la tarde nos llegó un comunicado en donde nos decían que bajáramos la persiana porque la empresa no abría más”, contó Alejandro Orellana, uno de los trabajadores despedidos en declaraciones al canal C5N.
Los empleados fueron al día siguiente en su horario laboral pero, efectivamente, el portón estaba cerrado. Nadie les dijo nada más. “No fuimos informados de nada, no recibimos ningún telegrama y la empresa tampoco presentó la quiebra. Fuimos al Ministerio de Trabajo y al sindicato pero no sabemos nada. Intimamos a la empresa a que nos den una respuesta, queremos conservar nuestros puestos de trabajo”, sostuvo el trabajador, que además informó que la empresa les adeuda el sueldo de julio y el aguinaldo.
Según contaron los trabajadores, la empresa tenía 35 años en el rubro y hasta el día anterior al cierre trabajaron con normalidad. “Esa mañana cargamos las ocho camionetas para entregar los pedidos y nos pusimos a armar las entregas para el día siguiente. La empresa tenía clientes exclusivos como LAN y HSBC”, informó Orellana.