La dirigente de la Tupac Amaru, Milagro Sala, detenida arbitrariamente desde enero del año pasado, le envió una carta al pueblo venezolano en la que llama a defender en América Latina "el camino que iniciaron Hugo Chávez, Lula (Da Silva), Dilma (Rousseff), Néstor (Kirchner), Cristina (Fernández) y Evo (Morales)". "Desde el Penal de Mujeres de Alto Comedero, donde estoy privada arbitrariamente de mi libertad por el gobierno de Mauricio Macri, les envío mi apoyo a la Asamblea Constituyente que realizarán el próximo 30 de julio", sostuvo la dirigente.
En vistas de la elección de la Asamblea Constituyente del domingo, convocadas por el presidente Nicolás Maduro, Sala consideró como “fundamental” e “indispensable” el llamado de Maduro para “para defender la democracia, la soberanía y la autodeterminación de los pueblos".
La dirigente social también rescató que "esta Asamblea Constituyente es la oportunidad que tienen los venezolanos de defenderse de la mentira de la derecha que en campaña habla de dialogo y felicidad, pero cuando llega al poder no hace más que perseguir, reprimir y castigar a los trabajadores y a los dirigentes sociales y políticos que defienden a las clases populares".
Y acotó que "el rechazo de la derecha a estas elecciones es la muestra más clara de cuánto les importa la democracia". "Cuando se trata de que sea el mismo pueblo el que decide sobre su futuro, los sectores neoliberales desconocen las elecciones libres y denuncian fraudes que no existen. Tan solo debemos recordar lo que decían del querido Chávez, que fue el presidente que más veces validó su cargo a través del voto popular", resaltó Sala.
La dirigente de la Tupac pidió a los venezolanos que este domingo “vayan a votar con conciencia, hagan valer sus derechos y defiendan sus intereses. No se dejen engañar por promesas vacías que solo les traerán dolor y miseria para el pueblo. Su voto definirá el destino del país y de todo Latinoamérica".
Venezuela se encuentra sumida en una crisis social y económica que dejó siete muertes en la reciente huelga de 48 horas. Las continuas protestas han dejado 112 víctimas en los últimos cuatro meses.