Con la ratificación de la resolución del Grupo de Trabajo sobre Detención Arbitraria de la ONU, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) canceló el libreto que desde octubre del año pasado ensayó el presidente Mauricio Macri en cada visita internacional en la que se lo consultó por la situación de la líder social: respecto de la independencia judicial, el federalismo y la invitación a los organismos internacional para que "chequeen la situación en Jujuy". Tomando en cuenta todo eso, la CIDH resolvió esta tarde que " el Estado Argentino de conformidad con sus obligaciones internacionales se encuentra obligado a atender la decisión" de la ONU.
Hace tres días, en diálogo con el canal 4 de Jujuy, Macri volvió a minimizar el incumplimiento del Estado con el sistema internacional de derecho al indicar que nunca se sorprendió por el reclamo de organismos, mandatarios y partidos políticos de varios países al considerar que "hay mucha política internacional alrededor" e insistió en una lectura de conformidad con la detención de Sala: "Yo lo veo muy tranquilo al jujeño, en general, respecto de lo que ha sucedido al terminar con esta organización mafiosa que se había instalado en Jujuy".
Tras acusar de "mafiosa" a Sala y a la Tupac, Macri siguió por desconocer, algo subrayado por la ONU y la CIDH, sobre la "excepcionalidad de la prisión preventiva". "Esperemos que las causas avancen y que se esclarezca cuál es la culpabilidad de Milagro Sala y de todo esa organización", dijo el presidente, cuando Sala llevaba 556 días detenida.