Con máximas que pueden llegar a los 37 grados -aunque la sensación térmica pueda ubicarse algunos puntos por encima- la Ciudad de Buenos Aires continúa envuelta en una ola de calor que la convierte en un horno para quienes circulan por ella día a día. Este viernes 10 de marzo el cielo se mantendrá parcialmente nublado durante toda la jornada, mientras sigue vigente el alerta rojo por calor extremo emitido por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) ¿cuándo llegan las lluvias?
Actualmente, la sensación térmica en la Ciudad es de 30 grados, la humedad se ubica en el 71% y el viento sopla del norte a 3 kilómetros por hora.
El alerta rojo también rige para varios partidos del conurbano sur. En el oeste de Entre Ríos y el noreste de la provincia de Buenos Aires la advertencia es naranja. En tanto, Santa Fe, Corrientes, Misiones, el norte de Córdoba, gran parte de Entre Ríos y el este de Santiago del Estero están bajo alerta amarilla.
Cómo seguirá el tiempo en los próximos días
El panorama para los próximos días tampoco es alentador. El sábado la mínima será de 23 y la máxima de 37 grados, con cielo parcialmente nublado y viento del norte y del noreste. En tanto que para el domingo se espera una mínima de 26 grados y una máxima de 36 grados. Para ninguno de los dos días se esperan lluvias, por lo que habrá que esperar para que llegue el esperado alivio.
Cómo actuar ante un golpe de calor
El golpe de calor es el incremento de la temperatura corporal por encima de los 40º y durante un tiempo prolongado. En condiciones normales, el cuerpo es capaz de controlar su temperatura y cuando sube, producir sudor como método para refrescarse.
Lo que ocurre durante un golpe de calor es que los mecanismos termorreguladores del cuerpo no funcionan correctamente y este es incapaz de restablecer su temperatura normal. El objetivo prioritario cuando una persona sufre un golpe de calor es intentar bajar su temperatura corporal a 37º. Para ello hay que:
- Recostar a la persona a la sombra y en una zona bien ventilada.
- Quitar o aflojar la ropa.
- Aplicar toallas, compresas o paños fríos sobre cuello, ingles, axilas y cabeza.
- Si la persona está consciente, ofrecerle agua para que beba poco a poco.
- Llamar a emergencias para trasladar al afectado a urgencias.
Generalmente, el golpe de calor se da cuando la persona está expuesta a altas temperaturas o se realizan actividades que requieren mucha energía en un ambiente con mucho calor.