El Observatorio de MuMaLá (Mujeres de la Matria Latinoamericana) presentó el informe el Costo de Menstruar 2023, que pone en evidencia el gasto mensual y anual que implica acceder a una canasta básica de productos de gestión menstrual. En comparación a 2022, el costo de la canasta tuvo un incremento mayor al 100%.
La concejala por Capital y coordinadora provincial de MuMaLá, Malvina Gareca, dijo a Salta/12 que es preciso que se empiece a discutir a nivel nacional la quita del IVA a los productos de higiene menstrual, ya que representan elementos de primera necesidad para las mujeres cis y personas de la comunidad LGBTIQ que menstrúan. El pedido es más urgente sobre todo en un contexto de crisis inflacionaria que enfrenta el país.
De acuerdo a los datos relevados en febrero de este año, la canasta básica alcanzó un valor mensual de $1.687,04. Con este parámetro, el valor anual sería de $20.244,48. Además, si se tiene en cuenta que una persona menstruante lo hace por un promedio de 40 años, el valor por ese período sería de $809.779,2, "sin considerar las fluctuaciones de precios con la inflación que vive año tras año nuestro país", señala el informe.
Si se comparan los actuales precios con los montos que surgieron en el informe de mayo de 2022, se puede evidenciar que la canasta básica de productos tuvo una suba superior al 100%, puesto que el valor mensual en ese momento era de $829,17; mientras que el coste por año era de $9.950,04, y $398.001,60, contando los 40 años.
Según el Observatorio de MuMaLá, la canasta básica debe estar conformada por los siguientes productos: 3 paquetes de toallitas femeninas marca Laydy Soft, que hoy tienen un valor de $821,13; un paquete de 20 unidades de protectores diarios marca Carefree, a un costo de $356,21; una caja de tampones por 8 unidades marca O. b. a $431,28; y dos pastillas de ibuprofeno a $78,42. La sumatoria concluye en un valor mensual de $1.687,04.
Gareca aclaró que estos valores refieren a lo que podría gastar una sola persona, por lo que es preciso tener en cuenta que "si fueran más cuerpos menstruantes
dentro de una familia, esta canasta básica menstrual se incrementaría". Por ejemplo, en una
familia tipo, si fueran 2 personas menstruantes, el gasto a cubrir para los productos de
gestión menstrual por mes sería de $3374,08; por año, de $40488,96; y por 40 años, de $1.619.558,4.
El relevamiento de estos datos se realizó en supermercados, farmacias, negocios de barrios de las distintas zonas de la ciudad de Salta (norte, centro, oeste, sur) y en las redes. También, en diferentes páginas de venta en línea, en farmacias con ventas en línea, en la página web del programa Precios Claros y en la de Precios Cuidados.
"Exponer las cifras del costo de menstruar nos permite visibilizar las desigualdades a nivel económico que implica la necesidad de adquirir los productos, y a la vez invita a entender que hay familias que no pueden acceder a esta canasta básica", aseguró la legisladora capitalina. Esta última afirmación también encontró un respaldo en el informe 2022, en el que se develó que debido a la crisis socioeconómica, 6 de cada 10 mujeres de barrios y villas populares de la ciudad dejaron de comprar productos de gestión menstrual para comprar alimentos.
Tal situación llevó a que desde MuMaLá y Libres del Sur se diera inicio a un trabajo territorial de recolección de productos de gestión menstrual para donarlos a familias carentes de recursos. También emprendieron la elaboración y entrega de productos alternativos, como las toallitas de tela.
Con este escenario, Gareca sostiene que es "fundamental" que se elimine el IVA en los productos de gestión menstrual puesto que con eso "se estaría dando la posibilidad de que la mayoría de las personas menstruantes pueda acceder". Esta quita impositiva también implicaría que los productos sean incorporados a la canasta básica, ya que es preciso que se comprenda que "menstruamos todos los meses y por un período de casi 40 años", reforzó la edila.
En este sentido se refirió al proyecto de ordenanza de su autoría que fue aprobado en el Concejo Deliberante de la ciudad de Salta el año pasado, de creación de un Programa de Gestión Menstrual municipal, iniciativa que también ingresó a la Legislatura provincial. Dicho proyecto reconoce la necesidad de entregar gratuitamente elementos de gestión menstrual a mujeres y personas menstruantes en situación de vulnerabilidad socioeconómica, definiendo su acceso como un derecho y a los productos como de necesidad básica.
Gareca adelantó que el proyecto ya cuenta con un presupuesto de al menos 10 millones de pesos y que empezará a ponerse en ejecución este año. Para ello, se retomaron las reuniones entre las áreas municipales y el cuerpo de concejales para establecer su implementación. Una de las alternativas que circuló ni bien se lo aprobó es que el programa se ponga en marcha de manera descentralizada y tenga como referencia a los Centros Integradores Comunitarios (CIC) o los edificios municipales donde se brinde asistencia a mujeres y personas de la diversidad.
"Es fundamental avanzar para achicar brechas sociales y de género", sostuvo la concejala, al tiempo que reiteró que el acceso a estos productos debe ser un derecho que colabore con el acceso a la salud, a la educación y al trabajo. "Ese fue y es el objetivo que tenemos: acceso a la Gestión Menstrual para más igualdad".