A casi cuatro años de la primera vez que se anunció, y a 16 años del hecho, el Tribunal de Juicio de Orán fijó nueva fecha para el juicio oral a los hermanos Delfín Reynaldo Castedo y Raúl Amadeo "Ula" Castedo por la autoría intelectual del asesinato de la pequeña productora rural Liliana Castedo, cometido el 21 de septiembre de 2006, en Salvador Mazza. 

Ahora el Tribunal, integrado para este caso por Edgardo Laurenci, Raúl Fernando López y Claudio Alejandro Parisi, anunció que el debate comenzará el próximo 20 de marzo, en la ciudad de San Ramón de la Nueva Orán. Como es la sexta vez que se anuncia, habrá que esperar para saber si efectivamente se hace. 

Liliana Ledesma fue asesinada a cuchilladas en la pasarela del barrio Las Rosas, en Salvador Mazza, donde residía junto a su madre y su hija, entonces todavía niña. Los asesinos le cortaron la boca. El ataque fue luego de que denunciara el cierre de caminos vecinales en la zona rural de la localidad fronteriza para facilitar actividades de contrabando de sustancias legales e ilegales. Ese cierre perjudicaba a la familia de Liliana, porque usaban esos caminos vecinales para llegar a sus puestos. 

Los hermanos Castedo, que ya eran investigados por narcotráfico, están acusados por  “instigación al homicidio, calificado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas”. Las personas que mataron a Ledesma, Aníbal Tárraga, Lino Abdemar Moreno, Casimiro "Nene" Torres y María Gabriela Aparicio, fueron juzgadas y condenadas a prisión perpetua en junio de 2010. En ese mismo juicio otras dos personas, Patricia Guerra y Juan Moreno, fueron condenadas por encubrimiento.

En las audiencias de ese debate quedó más claro que el ataque había sido ordenado por los hermanos Castedo, y José Ernesto Aparicio (fallecido en 2013, sin ser investigado), que era socio de los Castedo, además de hermano de María Gabriela Aparicio. Por escuchas telefónicas que habían sido ordenadas años antes en una causa en la que se los investigaba por narcotráfico, se supo incluso que los autores materiales habían recibido un pago de 20 mil pesos para cometer este crimen.

José Aparicio había sido acusado por la familia de Liliana la misma noche del crimen. La familia también señaló a los Castedo, pero el juez Nelso Aramayo, de Tartagal, que estuvo a cargo de esta causa, no investigó a Aparicio (que era diputado provincial) y solo convocó a una declaración informativa a los hermanos. Tiempo después, cuando la conmoción por el crimen ganaba potencia, se decidió a imputarlos, pero ya habían huido. 

Ula Castedo buscó esconderse en Bolivia, pero en aquel país fue detenido, por narcotráfico, fue juzgado y condenado y recién fue enviado a la Argentina a principios de 2016, requerido por la fiscalía federal de Salta, que lo investigaba por tráfico de estupefacientes. Delfín se mantuvo prófugo durante diez años y fue detenido en Buenos Aires recién a mediados de 2016, tambíen a instancias de la fiscalía federal. 

Desde el momento en que los hermanos estuvieron a disposición para ser indagados, y así avanzar con la acusación por el asesinato de Ledesma, la justicia provincial se tomó casi tres años para convocar a juicio por primera vez, en mayo de 2019, cuando ya habían pasado casi 13 años de la muerte de Liliana Ledesma. 

Sin embargo, el debate no se realizó, suspendido por un recurso de la defensa de los acusados. El Tribunal convocó a juicio nuevamente para octubre de 2019, y otra vez lo pospuso, hubo una nueva citación para mayo de 2020, pero lo suspendió por la pandemia. En diciembre de ese mismo año se hizo una nueva convocatoria, y se suspendió una vez más. Luego se fijó fecha para mayo de 2021, pero lo suspendieron porque no habían trasladado a los hermanos, que desde noviembre de 2019 están alojados en la cárcel de Ezeiza, por razones de seguridad, luego de que se detectara un plan de escape y de que el Servicio Penitenciario Federal los calificara como de alto riesgo de fuga o evasión.

Presencia remota 

Lo que para la Sala I del Tribunal de Juicio de Orán había sido un obstáculo insalvable, la imposibilidad de que los hermanos estuvieran en la sala de audiencia, para el Tribunal Oral Federal N° 1 de Salta no representó inconveniente en noviembre de 2021 a la hora de juzgar a los Castedo, y a otras cinco personas, por lavado de activos proveniente del narcotráfico. 

En todo ese proceso oral, que duró poco más de un año y concluyó en diciembre de 2022, con la condena de las siete personas juzgadas (Delfín Castedo recibió una pena de 16 años en calidad de jefe de la organización ilícita, y "Ula", nueve años, como integrante), los hermanos participaron por vía remota, sin ser movidos de la cárcel de Ezeiza. 

Teniendo presente este antecedente fiscala penal de Orán, Claudia Carreras, pidió esta semana que la audiencia en la justicia provincial "se realice con la presencia de los acusados de manera remota y empleando el sistema de videoconferencia POLICOM", informó el Ministerio Público Fiscal de Salta.

Ya en 2021 la fiscala había pedido que los hermanos siguieran el juicio por videoconferencia. Ahora Carreras recordó que el sistema Policom ya fue "utilizado en otras causas como las desarrolladas en el Tribunal Oral Federal de la ciudad de Salta, donde mediante los métodos tecnológicos empleados, se garantizaron los derechos constitucionales de los encartados", su seguridad y la conclusión del proceso penal. Y recordó que la reiteración del pedido "se sustenta en la falta de infraestructura de seguridad" en Orán para un proceso en el que se juzgará a personas que demanda "extremar las medidas de seguridad debido a la complejidad de la causa" y al traslado y permanencia de estas personas en una ciudad cercana a la frontera internacional. 

El Poder Judicial de Salta informó que el juicio comenzará el próximo lunes, 20 de marzo, a las 8.30, y se extenderá hasta el jueves 23. En total se ha previsto que se escucharán las declaraciones testimoniales de 18 personas. 

Además de la fiscala Carreras, la familia participa del proceso como querellante, con la representación del abogado David Leiva, mientras que los Castedo serán defendidos por el abogado Horacio Daniel Morales.