La comunidad educativa del Centro Educativo Isauro Arancibia (CEIA), del barrio de San Telmo, reclamó este lunes respuestas al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) por la inundación de fluidos cloacales que sufre el establecimiento desde hace más de una semana. Los líquidos subieron por las obras que se realizan en el metrobús del Bajo y la escuela no pudo ni siquiera empezar el ciclo lectivo 2023.
Con una conferencia de prensa y movilización, la comunidad reclamó respuestas para poder volver a abrir sus puertas a los 800 estudiantes que concurren a jardín maternal, primaria y secundaria, como así también a capacitación en oficios y emprendimientos de la economía social.
"Escuela cerrada por aguas cloacales", "Queremos a los estudiantes en clases, no en la calle" y "Se nos caen a pedazos las escuelas", fueron algunas de las consignas que acompañaron la jornada en la escuela, que hace más de 20 años trabaja con personas en situación de calle. Según explicaron las autoridades, las obras de la extensión del Metrobús del Bajo en la zona taparon las salidas cloacales y los fluidos comenzaron a emerger dentro del centro educativo, que debió cerrar sus puertas.
"Tenemos la escuela llena de excrementos y aguas servidas; no se puede estar adentro hace 10 días", denunció la coordinadora del establecimiento, Susana Reyes, quien enfatizó que "lo peor de todo es el silencio de las autoridades, como forma de violencia total".