Las clases en la Universidad Nacional de La Rioja (UNLaR), como en todas las universidades del país, debían comenzar este lunes, pero al paro dispuesto por 48 horas por el gremio de docentes universitarios SIDIUNLaR se sumó la protesta de estudiantes, docentes y no docentes que marcharon en la ciudad universitaria por condiciones “dignas” para el dictado y  cursado de clases.  

La institución, cuyo rector es Daniel Quiroga y la vice Marita Corzo enfrenta duras críticas por la situación edilicia y las condiciones de trabajo del personal docente.

Desde la carrera de Arquitectura convocaron a marchar al Rectorado para reclamar porque no cuentan con las condiciones para poder iniciar las clases. “Los invito a venir a clases a las 14 horas sin aire”  decía algunos de los carteles de estudiantes que también demandan el comedor y la cantina. 

Estudiantes y docentes afirman que las aulas están superpobladas y no cuentan con climatización cuando las temperaturas llegan a las 42 grados en La Rioja. La semana anterior hubo protestas y paro en el Colegio Preuniversitario General San Martín porque tampoco había condiciones para el dictado de clases.

En la mañana de este lunes, el Ministerio de Trabajo y Empleo de la Nación convocó a las autoridades de la UNLaR y al gremio SIDIUNLAR por las medidas de fuerza dispuesta para ayer y hoy. El sindicato, que pertenece a la CONADU exigió el compromiso para garantizar “las condiciones necesarias para el inicio del año académico en materia de infraestructura; el retorno planificado, ordenado y progresivo a la actividad académica, respetando la posibilidad practica y concreta para la presencialidad y la generación de condiciones para el ingreso y cobertura de vacantes transitorias y definitivas en el Colegio Preuniversitario General San Martin”. Hubo presentaciones para que la UNLaR pongan en condiciones el edificio antes el inicio de las clases. El Ministerio determino un cuarto intermedio hasta este viernes.

En tanto el gremio ARDU que es parte de la CONADU histórica está de paro por una semana pero en rechazo del acuerdo salarial cerrado a nivel nacional. El Congreso extraordinario del 10 de marzo realizado en una carpa frente al Ministerio de Educación de la Nación resolvió rechazar la oferta salarial del gobierno por el cierre de la paritaria 2022 e inicio de 2023 por considerarla totalmente insuficiente.