Bárbara Figueroa, embajadora chilena en la Argentina, destacó este miércoles la necesidad de que su país avance con el nuevo proceso constituyente, tras el revés en las urnas ocurrido el año pasado. "Debemos contar con una Constitución concebida en democracia porque la que tenemos hoy, con reformas y cambios, es la Constitución de una dictadura", dijo la representante en un encuentro con la prensa en la sede diplomática en Buenos Aires.
Figueroa admitió que el rechazo en septiembre pasado a la Carta Magna elaborada por una convención electa en 2021 fue un "fracaso" y además temió la posibilidad de que no surgiera una nueva iniciativa. Pero gracias al "esfuerzo sobrehumano" de todos los sectores políticos chilenos comenzó a transitarse un nuevo debate para dejar atrás el texto del régimen de Augusto Pinochet. "Chile supo entender que debe avanzar al respecto y no quedarse con lo que hay", precisó la diplomática, para quien esta decisión "no es poca cosa" en tiempos en los que la democracia se ve amenazada en el mundo.
En la actualidad, la redacción de una nueva Constitución está a cargo de un comité de expertos que, sostiene la embajadora, busca "resguardar los contornos" del proyecto previo y dosificar el "hiperpresidencialismo" vigente en el país. No obstante, insistió en que su viabilidad será decidida por el voto soberano de la ciudadanía chilena.
Mejoras sociales
Figueroa también se refirió a la "compleja y difícil" situación que atraviesa el Ejecutivo del presidente Gabriel Boric, después de que el Congreso rechazara la reforma tributaria, clave para la implementación de su programa de gobierno progresista. En sus palabras, ahora corresponde "reexplorar" las condiciones, hablar con todos los actores y evaluar si es necesario un nuevo proyecto o buscar otro mecanismo alternativo. "Para tener mejoras sociales se necesitan recursos permanentes, eso es lo central que buscamos con esta reforma", sentenció.
Consultada por la baja popularidad de Boric a un año de haber asumido, Figueroa dijo que no es algo que preocupe al Ejecutivo, si bien le "interesa" la aprobación de su gestión. Al respecto, admitió que "algo está fallando en la comunicación" porque la prioridad del gobierno es la gente y, por tanto, deben hacerse cargo del problema "completo" y no solo del reconocimiento a la figura presidencial.
Relación bilateral
La expresidenta de la Central Unitaria de Trabajadores habló, asimismo, sobre el vínculo con el gobierno de Alberto Fernández. Dijo que las relaciones entre Argentina y Chile "están muy bien" pese a que a veces pueda haber "tensiones", y el objetivo del gobierno de Boric es seguir fortaleciendo los puntos de convergencia en el ámbito comercial, energético o cultural".- En ese sentido, valoró la linea abierta y directa de diálogo con las autoridades argentinas.
Figueroa resaltó al "punto de inflexión" que deja en el mundo la guerra en Ucrania, y lo vital de los recursos estratégicos de la región como el litio, cobre o hidrógeno verde. "Ahí vemos un potencial de trabajo conjunto", aseveró, pero advirtió de la necesidad de fortalecer las condiciones logísticas y de infraestructura para poder caminar hacia la integración.
La embajadora sostuvo en ese sentido que va a haber una apuesta en torno al corredor bioceánico. "Todavía no hemos resuelto las condiciones logísticas. Si queremos hablar de integración lo primero es que la conectividad al menos terrestre tiene que ser mucho más fluida, porque eso nos permite desafiarnos a otras cosas". También destacó que su gobierno brega por que haya más inversiones chilenas en Argentina.